Asesiado en París Salah Bitar, ex político sirio exiliado en Francia

Tres días después del fallido intento de asesinato contra el antiguo primer ministro iraní Shapur Bajtiar, la capital francesa se convirtió el lunes por la mañana en teatro del asesinato de Salah Bitar, de 68 años, uno de los fundadores del partido Baas y primer ministro sirio cuatro veces.

Francia, «tierra de asilo», convertida en terreno de ajuste de cuentas de los hermanos-enemigos del mundo árabe: los franceses no acaban de discurrir sobre este tema desde que, a mediodia de ayer, un nuevo episodio trágico se sumó a los que desde hace algunos años se repiten con cierta regularidad. S...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Tres días después del fallido intento de asesinato contra el antiguo primer ministro iraní Shapur Bajtiar, la capital francesa se convirtió el lunes por la mañana en teatro del asesinato de Salah Bitar, de 68 años, uno de los fundadores del partido Baas y primer ministro sirio cuatro veces.

Francia, «tierra de asilo», convertida en terreno de ajuste de cuentas de los hermanos-enemigos del mundo árabe: los franceses no acaban de discurrir sobre este tema desde que, a mediodia de ayer, un nuevo episodio trágico se sumó a los que desde hace algunos años se repiten con cierta regularidad. Salah Bitar, ex primer ministro sirio y cofundador del partido Baas, fue muerto, de un tiro en la nuca cuando salía del ascensor de un edificio próximo a la plaza de la Estrella.El político sirio exiliado, como cada mañana, ayer se dirigía a la oficina de una revista teórica que él dirigía, titulada Primavera Arabe.

Bitar, de 68 años, fue uno de los dos fundadores del partido Baas, que, desde la independencia de Siria, subió al poder. Fue cuatro veces primer ministro y también dirigió la cartera de Exteriores. El representaba la fracción moderada del Baas, y, en 1966, fue eliminado por los duros del mismo partido. Se exilió en Líbano, fue condenado a muerte por contumaz y el actual presidente Assad lo indultó cuando subió al poder, en 1970. En 1977 Bitar retomó a su país, pero poco después lo abandonó de nuevo para instalarse en París, en donde fundó la revista precitada.

En los medios sirios del exilio parisiense, a pesar de que, en apariencia, no era hoy día un «hombre a eliminar», Bitar ha sido víctima del Gobierno de Damasco, «que se ha propuesto liquidar a todos los miembros de la oposición».

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En