Dos jóvenes murieron jugando a la ruleta rusa

, El juego de la ruleta rusa terminó trágicamente con la vida de dos jóvenes mallorquines la pasada madrugada, en un apartamento de la playa de Palma, cuando estaban acompañados por dos muchachas.

La tragedia ocurrió, sobre las dos y media de la mañana, en el cuarto piso del inmueble número once de la calle de Juan Floins. José Luis Busquets Salom, de veintitrés años, y Juan Miguel Jaume Mascaró, de veintinueve, decidieron practicar el juego de la ruleta rusa, para lo cual el primero cargó el arma y después de hacer rodar el tambor se apuntó a la sien y apretó el gatillo. El arma se...

, El juego de la ruleta rusa terminó trágicamente con la vida de dos jóvenes mallorquines la pasada madrugada, en un apartamento de la playa de Palma, cuando estaban acompañados por dos muchachas.

La tragedia ocurrió, sobre las dos y media de la mañana, en el cuarto piso del inmueble número once de la calle de Juan Floins. José Luis Busquets Salom, de veintitrés años, y Juan Miguel Jaume Mascaró, de veintinueve, decidieron practicar el juego de la ruleta rusa, para lo cual el primero cargó el arma y después de hacer rodar el tambor se apuntó a la sien y apretó el gatillo. El arma se disparó y murió en el acto. Al oír la detonación las dos muchachas, que se encontraban en la terraza, entraron en el mismo y vieron como el otro compañero, Juan Miguel, con el mismo revólver se apuntaba a la cabeza y disparaba seguidamente. Al instante se desplomó sin vida sobre el cadáver de su compañero.

Las dos muchachas, de diecisiete años, aterrorizadas abandonaron el piso y avisaron a la policía en el puesto cercano que ésta tiene en la playa del Arenal. Personado el juez y los inspectores de policía y tras identificar a los cadáveres, comprobaron que los dos muchachos, cuando practicaban el trágico juego, estaban, al parecer, bajo los efectos de la droga, pues hallaron el apartamento con gran cantidad de colillas de cigarros de hachís y en los bolsillos de una de las víctimas encontraron un tubo con anfetaminas. Los dos jóvenes estaban fichados por la policía como habituales delincuentes y conocidos drogadictos.

Las dos muchachas que les acompañaban declararon en el cuartel de la policía que cuando los dos chicos les dijeron que iban a jugar a la ruleta rusa pensaban que era una broma y nunca les tomaron en consideración.