Un joven, herido por disparos de la policía tras una accidentada persecución

Un joven de veintidós años, Ricardo Liaño, fue alcanzado hacia las 4.30 horas de la madrugada de ayer por dos disparos que realizaron los componentes de una patrulla policial. El suceso se produjo tras una accidentada persecución en la que el herido desoyó repetidas órdenes de alto e intentó atropellar a un cabo de la Policía Nacional, según la versión oficial facilitada al respecto a los informadores por los responsables policiales.El hecho se inició poco antes de las 4.30 de la madrugada, cuando la dotación de un coche radio-patrulla observó la presencia de un sospec.hoso en el interior de u...

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Un joven de veintidós años, Ricardo Liaño, fue alcanzado hacia las 4.30 horas de la madrugada de ayer por dos disparos que realizaron los componentes de una patrulla policial. El suceso se produjo tras una accidentada persecución en la que el herido desoyó repetidas órdenes de alto e intentó atropellar a un cabo de la Policía Nacional, según la versión oficial facilitada al respecto a los informadores por los responsables policiales.El hecho se inició poco antes de las 4.30 de la madrugada, cuando la dotación de un coche radio-patrulla observó la presencia de un sospec.hoso en el interior de un Chryslter que se,encontraba aparcado en. la calle del Padre Damián.

En el momento en que dos policías nacionales se acercaron al coche, el joven salió corriendo y se introdujo en un Seat-850 aparcado en las inmediaciones, en cuyo interior se encontraban varias personas más. El vehículo arrancó violentamente, sin atender las voces de aIto, por lo que los policías efectuaron varios disparos contra el coche. Este intentó arrollar al cabo de la policía en el momento de la huida.

Poco más tarde, el Seat-850 fue localizado en la calle de Los Narcisos, cerca de la M-30. Nuevamente intentó huir, y otra vez los policías dispararon contra las ruedas. El coche terminó colisionando con otros dos automóviles que se encontraban aparcados. Varios de sus ocupantes lograron escapar a pie, mientras la policía encontraba en el interior del vehículo al joven herido.

Trasladado a la residencia sanitaria La Paz, se le apreciaron dos impactos de bala en el hemitórax izquierdo, sin orificios de salida. Tras una intervención quirúrgica, en la que hubo que efectuar una transfusión de cinco litros de sangre, le fueron extraídas las dos balas. Su estado ha sido calificado de muy grave.

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