Las primeras reacciones confirman las escasas posibilidades de la moción del PSOE

La ejecutiva del PSOE y distintos órganos de dirección de los partidos parlamentarios analizaron ayer sus respectivas estrategias ante el voto de censura al Gobierno presentado por los socialistas, que comenzará a ser debatido el próximo miércoles en el Congreso. Fuentes del PSOE afirmaron que el objetivo principal es obtener la censura moral del Gobierno, y fuentes comunistas dijeron que apoyarán sin contrapartidas la postura socialista. El presidente de la CEOE, Carlos Ferrer Salat, se mostró «perplejo» por la presentación del voto de censura, y anunció que una gestión económica del PSOE oca...

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La ejecutiva del PSOE y distintos órganos de dirección de los partidos parlamentarios analizaron ayer sus respectivas estrategias ante el voto de censura al Gobierno presentado por los socialistas, que comenzará a ser debatido el próximo miércoles en el Congreso. Fuentes del PSOE afirmaron que el objetivo principal es obtener la censura moral del Gobierno, y fuentes comunistas dijeron que apoyarán sin contrapartidas la postura socialista. El presidente de la CEOE, Carlos Ferrer Salat, se mostró «perplejo» por la presentación del voto de censura, y anunció que una gestión económica del PSOE ocasionaría más inflación, mayor intervencionismo del Estado y aumento de la burocracia.

La Mesa del Congreso y la Junta de Portavoces decidieron ayer las normas del Pleno en que se debatirá la moción de censura. Habrá media hora para la defensa de la misma y otro espacio de igual duración para que intervenga el candidato a presidente, Felipe González, y para cada uno de los grupos.El debate será retransmitido por RTVE en las mismas condiciones que el de esta semana, y la votación se hará de forma nominal y pública. Otros detalles de procedimiento serán decididos el martes próximo.

El PCE va a apoyar la moción porque, «moral y políticamente, tenemos que apoyar toda propuesta de este tipo que salga de la izquierda y que vaya en contra del Gobierno de UCD», si bien, en el improbable supuesto de que los socialistas triunfaran y Felipe González se convirtiera en el nuevo presidente del Gobierno, Santiago Carrillo podría dejar claro que el voto comunista no supone un cheque en blanco al nuevo Gobierno socialista y a su programa. «El primer punto a pactar sería el mutuo apoyo de las dos grandes centrales sindicales de este país», agregaron las fuentes comunistas.

Por su parte, el PNV observa una gran reserva sobre la decisión a adoptar, ya que «nos plantea la necesidad de decidirnos a retornar al Parlamento o mantenernos en nuestra posición de no acudir», declaró ayer Carlos Garaikoetxea, presidente del PNV y del Gobierno vasco. Herri Batasuna mantiene su decisión de no acudir a las Cortes, si bien tomará una postura respecto a la moción de censura presentada por el PSOE. En cuanto a Juan María Bandrés, votará a favor de Felipe González.

Respecto a la eventual moción alternativa que estudió Coalición Democrática, el plazo para presentarla termina hoy. Se ignora cómo podrían conseguir las 35 firmas necesarias, ya que este grupo sólo tiene nueve diputados.

Páginas 13 y 14

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