Los cuadros robados no eran de Goya y Zurbarán

La Dirección General del Patrimonio Artístico, Archivos y Museos ha difundido una nota en la que se asegura que los cuadros de Goya y Zurbarán, que habían sido robados en una casa particular madrileña en mayo de 1979 y ha podido recuperar recientemente la policía, son apócrifos, es decir, que no parecen corresponder a esos autores. Inicialmente se había atribuido a estas obras un valor que excedía los mil millones de pesetas, e iban a ser vendidos a un belga por quince millones.Dos de los cinco óleos recuperados se atribuían a Goya, otro a Zurbarán y los restantes a Juan de Toledo. Se consider...

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La Dirección General del Patrimonio Artístico, Archivos y Museos ha difundido una nota en la que se asegura que los cuadros de Goya y Zurbarán, que habían sido robados en una casa particular madrileña en mayo de 1979 y ha podido recuperar recientemente la policía, son apócrifos, es decir, que no parecen corresponder a esos autores. Inicialmente se había atribuido a estas obras un valor que excedía los mil millones de pesetas, e iban a ser vendidos a un belga por quince millones.Dos de los cinco óleos recuperados se atribuían a Goya, otro a Zurbarán y los restantes a Juan de Toledo. Se considera autor personal del robo a un colombiano, Marco Julio Taborda, que actualmente cumple condena en prisión. El presunto ladrón había entregado los cuadros a María Luz Jiménez Portolés, una perista de 41 años, que pretendía venderlos sin hacer partícipe de los beneficios de la operación a Taborda. Un belga llamado Francisco José Seronveau iba a ser el comprador de las obras robadas, y dos portugueses habían actuado como intermediarios en los mercados clandestinos de Portugal, Francia, Suiza y Bélgica. Todos los presuntos implicados en la operación fueron arrestados por la policía el pasado fin de semana, y el caso se dio por cerrado.

En la nota difundida por la Dirección General del Patrimonio Artístico, Archivos y Museos se matiza que «con frecuencia se dan atribuciones y valoraciones de piezas que no corresponden con la realidad, en especial en el caso de robos a particulares. En este caso concreto, después de efectuado el oportuno examen por especialistas de esta dirección general, se puede afirmar que no tienen fundamento las valoraciones que se hicieron en su día debido a apreciaciones subjetivas». En la misma nota, la dirección general expresa su satisfacción por el nuevo éxito policial que supone la recuperación de los cuadros. En ella se propone también la concesión de la medalla de Bellas Artes al comisario que dirigió las operaciones y pesquisas

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