La Escuela de trabajadores del barrio del Pilar contra la demanda de la Caja de Ahorros

El colectivo de la Escuela de Trabajadores del barrio del Pilar hecho públicas unas puntualizaciones sobre la demanda judicial presentada por la Caja de Ahorros, de Madrid contra diez maestros de dicho centro (véase EL PAIS del pasado miércoles) y niega que se haya hecho cargo de su defensa la abogada y concejala del Ayuntamiento de Madrid Cristina Almeida, rechaza la calificación ideológica de «ácrata cristiana» de sus componentes y manifiesta que no son los maestros demandados los únicos responsables del centro, sino todo el colectivo.Señala en su escrito que los locales utilizados eran las ...

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El colectivo de la Escuela de Trabajadores del barrio del Pilar hecho públicas unas puntualizaciones sobre la demanda judicial presentada por la Caja de Ahorros, de Madrid contra diez maestros de dicho centro (véase EL PAIS del pasado miércoles) y niega que se haya hecho cargo de su defensa la abogada y concejala del Ayuntamiento de Madrid Cristina Almeida, rechaza la calificación ideológica de «ácrata cristiana» de sus componentes y manifiesta que no son los maestros demandados los únicos responsables del centro, sino todo el colectivo.Señala en su escrito que los locales utilizados eran las antiguas oficinas de venta de pisos de la urbanizadora José Banús y cuando fueron ocupados: mantenían, aún un cartel en este sentido. Los locales, dice el colectivo, llevaban abandonados más de cuatro años, razón por la cual decidieron los miembros de la escuela instalarse en ellos.

Una vez ocupados los locales el colectivo, recibió la comunicación de que días antes habían sido comprados por la caja de ahorros, que había pagado por ellas medio millón de pesetas, para construir la quinta sucursal de la zona. Días más tarde se entablaron negociaciones entre ambas partes, pues la entidad bancaria prometió la cesión de otros locales para que pudiese instalarse el centro educativo. Al no tener la Escuela entidad jurídica, la caja de ahorros solicitó varios nombres de personas para que actuasen como responsables en su nombre. Una vez conocidos estos nombres, señala el comunicado, la Caja rompió las negociaciones y presentó la demanda.

Por último, indica que el abogado que defiende a los demandados es el señor Aritio, por lo que la alusión a Cristina Almeida es otro intento de manipulación contra la concejala.

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