Rotas las negociaciones para el convenio del Metro

La dirección del Metro de Madrid rompió ayer oficialmente las negociaciones que mantenía con el comité de empresa. ante la falta de acuerdo sobre el convenio colectivo de este año. La ruptura se produjo después dé que los trabajadores hicieran una contraoferta económica, por la que se bajaba del 17% pedido hasta ahora a un 15,6%, porcentaje que tampoco aceptó la dirección.

La situación así creada parece que endurecerá aún más la postura de los trabajadores, que tienen en la continuidad de las huelgas la única posibilidad de retrasar la aplicación de un laudo. Frente a esta actitud, el m...

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La dirección del Metro de Madrid rompió ayer oficialmente las negociaciones que mantenía con el comité de empresa. ante la falta de acuerdo sobre el convenio colectivo de este año. La ruptura se produjo después dé que los trabajadores hicieran una contraoferta económica, por la que se bajaba del 17% pedido hasta ahora a un 15,6%, porcentaje que tampoco aceptó la dirección.

La situación así creada parece que endurecerá aún más la postura de los trabajadores, que tienen en la continuidad de las huelgas la única posibilidad de retrasar la aplicación de un laudo. Frente a esta actitud, el ministro de Trabajo, al término del Consejo de Ministros celebrado ayer, manifestó que el Gobierno garantizará un servicio mínimo del Metro en, futuras huelgas.Las negociaciones, que según había anunciado la dirección de la empresa iban a reanudarse ayer, dieron un giro inesperado para los trabajadores, al quedar rotas después de que la dirección y el comité concretaran definitivamente sus posiciones. Mientras la dirección se ratificaba en que el nuevo convenio incrementaría todos los conceptos económicos de los trabajadores en un 10,8% y se aplicaría un 1 % más en otros puntos a discutir, los miembros del comité hicieron una contraoferta económica, ya que la que figuraba en las actas se elevaba a un 1771. La nueva petición fue la de firmar un convenio por un año con un incremento del 15,6% y una revisión semestral equivalente al porcentaje del coste de la vida que supere el 6% en junio de este año.

Tanto esta nueva petición como los tres puntos considerados básicos por los trabajadores -jubilación voluntaria a, los sesenta años, creación de una comisión para el estudio de los puestos tóxicos, penosos y peligrosos y jornada continuada para técnicos y administrativos, fueron definitivamente rechazados por la dirección, que optó por romper las negociaciones. Ambas partes quedaron, sin embargo, de acuerdo en realizar una entrevista con el delegado provincial de Trabajo o cualquier otro mediador.

El Gobierno garantizará un servicio mínimo

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El Gobierno fue informado en su reunión de ayer sobre la negociación del convenio colectivo del Metro madrileño por el ministro de Transportes. Al término del Consejo, el titular de Trabajo, Rafael Calvo, compareció ante los periodistas para dar cuenta de la postura del Gabinete en torno a este tema.

En el caso de que se produzcan nuevas huelgas y no se cumpla en ellas lo dispuesto sobre mantenimiento del servicio en las horas-punta, Calvo Ortega manifestó que el Gobierno utilizará todos los medios que le confiere la legislación vigente para que el Metro funcione y que una de la posibilidades que tiene es la de sustituir a los trabajadores de la companía por otros. Añadió que sin embargo, el Ministerio de Trabajo ha confiado siempre en el sentido de responsabilidad d las centrales sindicales y que confía en que no será necesario recurrir a ninguno de estos métodos.

Expedientes disciplinarios

Sobre las consecuencias de los expedientes disciplinarios abiertos a 2.000 trabajadores, dijo que el tema no es competencia del Gobierno, sino de la empresa, y que, en cualquier caso, no se puede anticipar nada antes de que concluyan y se concreten las responsabilidades. Declaró luego que su Ministerio está siempre dispuesto a mediar en cualquier conflicto y que lo hizo el mismo día de San José, sin que fuera posible encontrar una solución.

Negó, por último, que haya existido ningún intento de militarizar el servicio, «porque existen otros recursos, lo cual no quiere decir que se excluya totalmente la militarización, aunque en la última huelga no se con templó en ningún momento esta posibilidad».

Al margen de las contestaciones dadas a las preguntas de los periodistas, el ministro de Trabajo dio lectura a una nota en la que el Gobierno se reafirma en su de cisión de mantener el real decreto de servicios mínimos, por considerar que no vulnera la Constitución y es conforme a las resoluciones de la Organización Internacional de Trabajo (OIT). El ministro citó concretamente el artículo 28.2 de la Constitución, que tras reconocer el derecho de huelga dispone que se establecerán « las garantías precisas para asegurar el mantenimiento de los servicios mínimos de la comunidad». El Gobierno se ratifica en su respeto al ejercicio del derecho de huelga, pero al propio tiempo considera que los servicios del Metro y el Suburbano son esenciales para la comunidad madrileña y, por tanto, está decidido a impedir su total paralización.

Si hay nuevas huelgas, Tierno defenderá la militarización

En relación con la huelga mantenida el jueves por los trabajadores del Metro, el alcalde de Madrid, Enrique Tierno, declaró ayer en el preámbulo de la habitual comisión permanente municipal, que «si el desorden continuase, si los trabajadores del Metro persistiesen en su actitud, tendría que ver con buenos ojos la militarización del servicio. No me es grata. No me satisface. Pero en el caso de que se llegase a esa medida, hay que tener en cuenta que lo erróneo va en favor de la balanza del Gobierno».

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