Los empleados del Metro solicitan huelga legal para el próximo miércoles

El comité de empresa del Metro presentó el pasado lunes una petición de huelga legal desde las seis de la mañana del próximo día 14 hasta la misma hora del día siguiente, para denunciar el incumplimiento de varios artículos del convenio colectivo relacionados con la concesión de préstamos para viviendas y con la falta de cursos de formación profesional.

La solicitud, ratificada por unos 1.500 trabajadores reunidos en asamblea, es la segunda que se produce, ya que para el mismo día los trabajadores habían solicitado un paro para protestar por las últimas agresiones sufridas y para solici...

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El comité de empresa del Metro presentó el pasado lunes una petición de huelga legal desde las seis de la mañana del próximo día 14 hasta la misma hora del día siguiente, para denunciar el incumplimiento de varios artículos del convenio colectivo relacionados con la concesión de préstamos para viviendas y con la falta de cursos de formación profesional.

La solicitud, ratificada por unos 1.500 trabajadores reunidos en asamblea, es la segunda que se produce, ya que para el mismo día los trabajadores habían solicitado un paro para protestar por las últimas agresiones sufridas y para solicitar un aumento de plantilla.El día 14 no funcionará ninguna línea de Metro, incluido el Suburbano, en caso de que la empresa no llegue antes a un acuerdo con los trabajadores sobre los puntos del convenio que, a juicio de éstos, han quedado incumplidos. Entre estos puntos destaca la falta de préstamos sin interés para la compra de viviendas y la inexistencia de cursos de formación profesional, tal como obliga la ley de Relaciones Laborales, vigente desde 1976.

«Han pasado ya cuatro años y el hecho de que los empleados no hayamos recibido este tipo de cursos provoca, en una empresa como es la del Metro, un desfase importante entre la tecnología y el conocimiento que se tiene sobre la misma, manifestó uno de los empleados preguntados2.

Se da la circunstancia de que, como consecuencia de este desfase, según informaron los trabajadores, se ha tenido que poner en manos de contratas privadas la revisión de los coches que funcionan en las nuevas líneas, y «similares problemas se producen en la conducción y manejo de estas unidades, que son encargadas a empleados sin una preparación técnica completa».

Los nuevos vigilantes de seguridad han significado, por otra parte, una disminución en el número de agresiones sufridas por los empleados en el desempeño de sus funciones, tema este que también se había esgrimido.

Junto a la solución completa de este problema, los empleados piden que se aumente la plantilla de la compañía, ya que ésta es insuficiente en las horas punta, lo que conlleva un enfrentamiento empleados-público.

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Durante las veinticuatro horas que dure el paro funcionará un retén para el cuidado de las instalaciones, servicio que, según se decidió en la asamblea, será retirado de movilizarse personal militar para suplir a los empleados de la compañía.

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