Un vigilante jurado del aeropuerto de Barajas, herido grave de un disparo

Un guarda jurado de la zona industrial del aeropuerto de Barajas, Valeriano Sánchez Gil, resultó herido de gravedad, el lunes por la noche, a consecuencia de un disparo efectuado por tres desconocidos que le arrebataron su arma reglamentaria.El suceso tuvo lugar hacia las once menos cuarto de la noche. Los tres asaltantes se acercaron al puesto de vigilancia número diez de la zona industrial de Barajas, y sin que al parecer mediase palabra efectuaron varios disparos con una escopeta de cañones recortados. Uno de los disparos alcanzó en un costado al vigilante.

Después de apoderarse de s...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Un guarda jurado de la zona industrial del aeropuerto de Barajas, Valeriano Sánchez Gil, resultó herido de gravedad, el lunes por la noche, a consecuencia de un disparo efectuado por tres desconocidos que le arrebataron su arma reglamentaria.El suceso tuvo lugar hacia las once menos cuarto de la noche. Los tres asaltantes se acercaron al puesto de vigilancia número diez de la zona industrial de Barajas, y sin que al parecer mediase palabra efectuaron varios disparos con una escopeta de cañones recortados. Uno de los disparos alcanzó en un costado al vigilante.

Después de apoderarse de su pistola, los tres agresores se dieron a la fuga, sin que por el momento hayan sido detenidos. Dado el desarrollo de los hechos, el móvil de la acción no fue otro que el conseguir el arma, ya que ni siquiera intentaron robarle ningún otro objeto.

El señor Sánchez Gil fue recogido minutos más tarde por otros compañeros y trasladado a la residencia sanitaria La Paz, donde se encuentra internado. Las heridas que padece han sido calificadas de pronóstico grave.

Sucesos de esta naturaleza, en los que se producen lesiones contra las personas sin otro objetivo que el de apoderarse de un arma, se vienen sucediendo con excesiva frecuencia en Madrid a lo largo de los últimos meses, en los que la crónica policial recoge asaltos contra guardas jurados y, en general, contra personas que disponen de permiso de armas.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En