Minusválidos y derechos humanos

La noticia publicada en la última página de EL PAÍS, el día 14 de septiembre, referente a la maestra andaluza Carmen Ortiz Pérez, nos parece tan triste y tan increíble que pensamos pueda tratarse de algún equívoco, que será rápidamente subsanado. De todos modos no nos parece inoportuno aprovechar esta ocasión para hacer una reflexión sobre la situación legal y social, entre nosotros, de los minusválidos. Una recta comprensión de los derechos humanos exigiría muy especiales facilidades para hacerles posible un ejercicio profesional normal. Pero en nuestra realidad de cada día, ¿qué es lo que ve...

La noticia publicada en la última página de EL PAÍS, el día 14 de septiembre, referente a la maestra andaluza Carmen Ortiz Pérez, nos parece tan triste y tan increíble que pensamos pueda tratarse de algún equívoco, que será rápidamente subsanado. De todos modos no nos parece inoportuno aprovechar esta ocasión para hacer una reflexión sobre la situación legal y social, entre nosotros, de los minusválidos. Una recta comprensión de los derechos humanos exigiría muy especiales facilidades para hacerles posible un ejercicio profesional normal. Pero en nuestra realidad de cada día, ¿qué es lo que vemos? Pues que a una maestra, que ha ejercido su profesión a satisfacción de todos los interesados durante cuatro años, se le pueden negar sus posibilidades docentes por el «delito» de ser minusválida. Si es así, ¿en qué país vivimos? Por nuestra parte, nos hemos sentido impelidos a hacer en voz alta esta llamada a la conciencia colectiva de nuestros conciudadanos.