El Gobierno eludió el debate sobre desequilibrios territoriales

El debate parlamentario sobre desequilibrios territoriales provocó la indignación de prácticamente la totalidad del Congreso de los Diputados -excepto UCD- por la no intervención del Gobierno en el tema. El ministro para las Relaciones con las Cortes, Rafael Arias-Salgado, intentó justificar la inhibición gubernamental y asimismo lo hizo el presidente de la Cámara, Landelino Lavilla. Los ataques de los grupos, especialmente socialistas y comunistas, se dirigieron fundamentalmente al ministro de Administración Territorial, Antonio Fontán. Según pudo saber EL PAÍS, el propio vicepresidente segun...

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El debate parlamentario sobre desequilibrios territoriales provocó la indignación de prácticamente la totalidad del Congreso de los Diputados -excepto UCD- por la no intervención del Gobierno en el tema. El ministro para las Relaciones con las Cortes, Rafael Arias-Salgado, intentó justificar la inhibición gubernamental y asimismo lo hizo el presidente de la Cámara, Landelino Lavilla. Los ataques de los grupos, especialmente socialistas y comunistas, se dirigieron fundamentalmente al ministro de Administración Territorial, Antonio Fontán. Según pudo saber EL PAÍS, el propio vicepresidente segundo, Fernando Abril, se mostró contrariado por la inhibición del señor Fontán y terminó subiendo a la tribuna de oradores para decir que todos los grupos coincidían con el Gobierno en la necesidad de la solidaridad entre las regiones.A falta de debate con el Gobierno, la sesión plenaria, que continúa hoy, proporcionó controversias entre los grupos, especialmente agrias entre el Grupo Andalucista y los grupos Comunista y Socialista.

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