Mil quinientas personas, en el entierro del joven muerto en un control de la Guardia Civil

Cerca de 1.500 personas asistieron a primera hora de la tarde de ayer, en Santa Cruz de Retamar (Toledo), al entierro del joven José Luis Muñoz Pérez, de quince años de edad, fallecido al ser alcanzado por un disparo de la Guardia Civil el pasado sábado, día 6. El funeral se ha celebrado en la iglesia parroquial de la mencionada localidad, en medio de un gran silencio, según informa Europa Press. El féretro que contenía los restos del muchado fue llevado a hombros hasta el cementerio.El Gobierno Civil de Madrid hizo público el pasado domingo una nota oficial en la que amplía los detalle...

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Cerca de 1.500 personas asistieron a primera hora de la tarde de ayer, en Santa Cruz de Retamar (Toledo), al entierro del joven José Luis Muñoz Pérez, de quince años de edad, fallecido al ser alcanzado por un disparo de la Guardia Civil el pasado sábado, día 6. El funeral se ha celebrado en la iglesia parroquial de la mencionada localidad, en medio de un gran silencio, según informa Europa Press. El féretro que contenía los restos del muchado fue llevado a hombros hasta el cementerio.El Gobierno Civil de Madrid hizo público el pasado domingo una nota oficial en la que amplía los detalles que rodearon la muerte de José Luis Muñoz: «En relación con el desgraciado incidente, por todos lamentado, que costó la vida al joven José Luis Muñoz -dice el comunicado-, al rebasar el auto en que viajaba un control que la Guardia Civil tenía establecido en el kilómetro 36,800 de la carretera nacional V, Madrid-Extremadura, el Gobierno Civil de Madrid ha solicitado de la 112 Comandancia de la Guardia Civil un informe oficial en el que se confirma que sobre las 14.15 horas del sábado un Renaul-10, de color azul, matrícula M-721.207, se aproximó al control establecido, rebasando las cuatro señalizaciones, separadas por unas distancias de cien, noventa y 130 metros, respectivamente, y haciendo caso omiso de las señales de «alto» de un primer guardia, continuó su marcha rebasando a otros dos miembros del control que también dieron el «alto».

«Al verse pasado el tercero de ellos -añade la nota- a unos cuatrocientos metros de la primera señal de control disparó al aire, al tiempo que gritaba, por dos o tres veces, «alto». Como quiera que el coche continuara sin parar, realizó un nuevo disparo que, según parece, entró por la puerta,traserá y el respaldo del asiento, hiriendo a José Luis Muñoz Pérez, tal y como se pudo comprobar cuando el automóvil se detuvo, a 445 metros de la primera señal. »

Por su parte, la familia del joven muerto insistió ayer que la nota del Gobierno Civil, en su opinión, es completamente errónea.

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