La situación iraní puede incrementar el alza de los precios del petróleo

La situación en que actualmente se encuentra Irán pudiera ser factor desencadenante de una subida del petróleo superior a lo previsto, según opinión generalizada en los medios financieros internacionales. En principio, el aumento previsto se cifraba en el 5%, pero la evolución de los acontecimientos en Irán hacen temer por una elevación superior, no por debajo del 10%.

En Estados Unidos existe ya la práctica certeza de que, de continuar la actual situación iraní, los países más duros de la OPEP (Organización de Países Productores y Exportadores de Petróleo) lograrán imponer un aumento d...

La situación en que actualmente se encuentra Irán pudiera ser factor desencadenante de una subida del petróleo superior a lo previsto, según opinión generalizada en los medios financieros internacionales. En principio, el aumento previsto se cifraba en el 5%, pero la evolución de los acontecimientos en Irán hacen temer por una elevación superior, no por debajo del 10%.

En Estados Unidos existe ya la práctica certeza de que, de continuar la actual situación iraní, los países más duros de la OPEP (Organización de Países Productores y Exportadores de Petróleo) lograrán imponer un aumento de al menos el 10% en la próxima conferencia anual de la organización, que se reunirá en diciembre en Abu Dhabi, capital de los Emiratos Arabes Unidos del golfo Pérsico. Asimismo, se insiste en que la reciente depreciación del dólar y la inflación que padecen la mayor parte de los productores serán causas complementarias desencadenantes de un aumento sustancial en los precios de los crudos.«Un aumento de los precios del petróleo podría llegar a tener repercusiones muy negativas en los países que no tienen sus economías en orden», declaró este fin de semana en Caracas el economista norteamericano John Kenneth Galbraith. Según el economista, la República Federal de Alemania y Japón son los únicos países que han podido absorber con cierta facilidad los aumentos del petróleo, al tener sus economías en cierto grado de ajuste; otros, por el contrario, como es el caso de Estados Unidos, absorben con excesivas dificultades los incrementos de los precios de los crudos.

Galbraith criticó también duramente a las dictaduras latinoamericanas, afirmando que encubren sus propios errores en materia económica y engañan permanentemente a sus pueblos respectivos.