CCOO denuncia el plan de reestructuración textil

«El plan de reestructuración textil supone una panacea para muchos empresarios, que al acogerse al mismo consiguen evitar el pago de una serie de indemnizaciones que servirían, al menos momentáneamente, para aliviar la situación de los trabajadores que entran a formar parte de la larga lista de parados», informó un portavoz del secretariado textil de CCOO a la agencia Efe.«La primera etapa de este plan -agregó-, desde 1975 a 1977, significó el paro para más de 1.500 trabajadores, y la segunda, que acaba de iniciarse y durará hasta 1980, aumentará el paro en el ramo considerablemente.»...

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«El plan de reestructuración textil supone una panacea para muchos empresarios, que al acogerse al mismo consiguen evitar el pago de una serie de indemnizaciones que servirían, al menos momentáneamente, para aliviar la situación de los trabajadores que entran a formar parte de la larga lista de parados», informó un portavoz del secretariado textil de CCOO a la agencia Efe.«La primera etapa de este plan -agregó-, desde 1975 a 1977, significó el paro para más de 1.500 trabajadores, y la segunda, que acaba de iniciarse y durará hasta 1980, aumentará el paro en el ramo considerablemente.»

El plan de reestructuración se elaboró «muy alegremente», comentó, y en vez de conseguir una fórmula que mejorara la competitividad de cara a los mercados exteriores, «se utiliza como salvavidas para que los empresarios puedan cerrar sus industrias sin ningún cargo económico importante».

«El futuro del textil en Sabadell y Tarrasa -concluyó- es muy negro y a los cierres de Alpinter, con doscientos trabajadores, y Textiles Modernos, con ochenta, habrá que añadir los posibles de Ramiro Fernández, con más de 170; Ramón Mallofre, con 45, y Castelar y Compañía, con 140 trabajadores.»

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