Entrevista:

Carlos Garaicoechea: "No es posible una Euskadi en paz si no progresa hacia el autogobierno"

EL PAIS. ¿Qué balance hace el PNV de sus dieciséis meses de actuación parlamentaria?Juan Carlos Garaicoechea. La actuación de nuestros parlamentarios, desde el comienzo, ha venido produciendo algunos frutos importantes, aunque no todos los que hubiéramos deseado. Así desde el principio, se luchó denodadamente en Madrid por problemas como la amnistía que, guste o no guste, fue debida en gran medida no sólo a las actuaciones parlamentarias, sino a las estrictamente políticas de los representantes de nuestro partido. Los parlamentarios del PNV han explicado en el Parlamento, con coh...

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EL PAIS. ¿Qué balance hace el PNV de sus dieciséis meses de actuación parlamentaria?Juan Carlos Garaicoechea. La actuación de nuestros parlamentarios, desde el comienzo, ha venido produciendo algunos frutos importantes, aunque no todos los que hubiéramos deseado. Así desde el principio, se luchó denodadamente en Madrid por problemas como la amnistía que, guste o no guste, fue debida en gran medida no sólo a las actuaciones parlamentarias, sino a las estrictamente políticas de los representantes de nuestro partido. Los parlamentarios del PNV han explicado en el Parlamento, con coherencia, dignidad y firmeza cual es el planteamiento que nosotros hacemos en relación con los derechos políticos del pueblo vasco. En el debate constitucional, esto no ha tenido un encaje satisfactorio, ya que lo fundamental de nuestras tesis no ha sido recogido en el texto de la Constitución, pero ha producido frutos secundarios de cierta importancia. Por reseñar alguno, yo citaría la apertura constitucional a la hora de concebir las autonomías en el articulo 149. Esto ha sido, reconocido no por nosotros, sino por representantes de otras nacionalidades que lo han señalado como un logro de los parlamentarios del PNV. Quienes dicen que no hemos conseguido nada, no están en lo cierto y creo que no son objetivos. Esto sin perjuicio de que seamos nosotros los primeros insatisfechos con los logros totales obtenidos por nuestros parlamentarios, razón primordial por la que no estamos de acuerdo con la Constitución, que es en definitiva la gran labor del Parlamento.

P. ¿Qué une y qué separa al PNV de los partidos abertzales?

R. Con otros partidos de la izquierda vasca abertzale, nos puede unir la comunidad de sentimientos nacionales vascos, nuestra concepción de Euskadi como nación, en definitiva, y la reivindicación común de un poder político para nuestro país. Pero nos separan sustanciales diferencias ideológicas, ya que el marxismo o el marxismo-leninismo están presentes en los partidos de la izquierda abertzale. Y, desde luego, nos diferencia con respecto a una facción muy concreta de ese espectro político vasco, el rechazo de la utilización de procedimientos violentos y, en definitiva, de la lucha armada.

Conmoción en el partido

P. En cuanto a la manifestación prevista para hoy en Bilbao, parece que ha habido un gran revuelo entre la base de su partido que no comparte la convocatoria.R. No hay tal revuelo. Creo que las posibles discrepancias las están explicando gozosamente algunos que les gustaría que hubiesen existido. Lo que si ha habido, y hay que reconocerlo, es una cierta conmoción, que no se ha producido sólo en determinados sectores de la base, sino en muchos de nosotros, como sucede siempre que, por una causa u otra, nos vemos enfrentados con otros sectores de la sociedad vasca, aunque sea dialécticamente. Sentimos esta situación, pero los planteamientos que nos obligan a tomar ciertas decisiones, no son los que nosotros hacemos sino los que existen, y muy a nuestro pesar. En este sentido, no es una novedad para el PNV repudiar y condenar los actos de violencia, aunque provinieran de ETA, porque cada vez que se producía un atentado en este país, indefectiblemente, como lo ha dicho la propia ETA, ha habido una condena del PNV. Lo que sucede ahora es que el PNV, después de su comunicado, ha querido que se desarrollara toda una campaña de clarificación en torno a este fenómeno de la violencia para que de una manera nítida, la posición del partido, tanto a efectos internos como por su propia clarificación frente al exterior quedara inequívocamente señalada.

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P. En un reciente comunicado se señalaba que el PNV estaba dispuesto a suspender la manifestación si ETA renunciaba a la violencia. ¿La manifestación de Bilbao está dirigida esencialmente contra ETA?

R. No. Lo que sucede es que ETA, evidentemente, es un sector fundamental en el ejercicio de los procedimientos violentos en Euskadi hoy. Eso sería absurdo desconocerlo. El hecho de que hayamos denunciado otras actuaciones de la extrema derecha, de los incontrolados y de las mismas fuerzas. de orden público, en ocasiones, no resta evidencia al papel fundamental que en este enorme problema está desarrollando ETA. Cuando ETA-m ha pedido que reconsideremos la convocatoria, nosotros hemos dicho que sería más lógico, ya que se habla de no sembrar el divisionismo entre las fuerzas vascas, que ellos replantearan sus actuaciones y cuando menos ofrecieran una tregua para que las fuerzas vascas tuvieran oportunidad de debatir y replantear sus propios problemas. Naturalmente, el PNV seguiría repudiando los actos violentos en la medida en que se siguiesen produciendo en el país.

Clímax de fuerte intensidad

P. ¿Por qué surgió la convocatoria de manifestación?R. Surgió porque tenía que suceder un día u otro, porque el climax al que se está llegando en Euskadi es ya tremendo y carente de precedentes en cuanto a intensidad. Lo cierto es que el PNV, que ha tenido una postura clara en este sentido, venía siendo maliciosamente señalado como ambiguo o poco resolutivo ante este tipo de hechos. Y cuando ha tenido la iniciativa más llamativa, a la hora de condenar la violencia, de cuantas se han producido hasta la fecha, curiosamente se le ha solicitado que cediera su iniciativa a otros organismos, bien al Consejo General Vasco a otros partidos, sin duda porque persistía el deseo, por parte de algunas fuerzas políticas, de evitar esa clarificación del PNV para seguir imputándole ambigüedades o falta de clarificación al respecto.

P. ¿Se va a producir, a raíz de la manifestación, una separación profunda entre el PNV y los partidos abertzales?

R. La división no va a venir por el hecho de que alguien exprese unas determinadas concepciones sobre la paz o la violencia. Y eso es lo que estamos haciendo nosotros: utilizar el derecho democrático a expresar unas concepciones. Lo que produce la división no es el derecho a manifestarse de una manera determinada, sino las acciones que irremisiblemente nos pueden condenar a la división. Y en ese sentido, creemos que actuar creando todo un clima, generalizado para un país, en el que la violencia aparezca siempre, es obligar a todos al trágala de un clima determinado de inestabilidad y de inseguridad. Lo que crea la división no es el derecho legítimo a expresar sus concepciones, sino las concepciones mismas, distintas en los diferentes partido sobre las vías políticas o las violentas. O las concepciones sobre la utilidad de las vías políticas y la necesidad de utilizar las armas. Nadie puede acusar de divisionista a los demás, por expresar sus legítimas convicciones.

P. ¿Cuál es el papel que él PNV concede a ETA?

R. Yo creo que aquí, por desgracia, en los últimos años nadie puede alardear de haber conseguido para Euskadi grandes cosas, porque estamos todavía carentes de las más. elementales recuperaciones de poder político para nuestro pueblo. Es muy aventurado adjudicarse los méritos o los deméritos hacia el autogobierno, ya que por desgracia el poder central no ha dado, por el momento, oportunidades a nadie de los que intentamos hacer política en Euskadi, de adjudicarnos grandes conquistas. Lo que sí es cierto es que la valoración que se hacía de las actuaciones de ETA hasta hace tres años y la que se hace en el presente, ha cambiado sustancialmente en muchas personas. Nosotros nos sentimos particularmente distanciados de ETA el día en que comenzaron sus acciones cruentas.

P. -¿Teme posibles enfrentamientos en Bilbao durante la manifestación?

R. Espero que no pase nada, porque quizá estoy muy imbuido de un concepto que nosotros tenemos muy arraigado, como es el de respetar a los demás. Por consiguiente, espero que aún aquellos que no mantienen los mismos puntos de vista que nosotros, no se dediquen al antidemocrático trabajo de obstaculizar o reventar nuestra manifestación.

P. ¿Existe realmente el peligro de que Euskadi se convierta en un Ulster?

R. Dije en un mitin, ante determinados observadores que, esto comenzaba a oler a Ulster y que esa impresión tenía efectos muy perniciosos. Por ejemplo, a la hora de animar a inversionistas para que vengan a este país. Creo que algo, de ulsterlzación se está produciendo en Euskadi. De ahí, que sea tan importante saber adoptar medidas políticas adecuadas para que este proceso no siga adelante, de tal modo que nadie pueda autojustificar sus movímientos, tendentes a la creación de un ambiente de constante tensión e inseguridad.

Oportunidad perdida

P. ¿Qué medidas políticas puede tomar el PNV a la vista de que ETA-m ya ha anunciado que no renuncia a la lucha armada?R. Es muy diferente que ETA cuente con un amplio respaldo popular, como lo tuvo durante el franquismo, a que se vaya convirtiendo en un grupo mucho más aislado del que se vayan despegando los propios sectores de la izquierda revolucionaria vasca, como de hecho está sucediendo ahora. Por eso, creemos que es imprescindible que se vaya avanzando rapidísimamente en la devolución de su autogobierno al pueblo vasco para que una gran parte de los ingredientes justificativos de las acciones violentas desaparezcan.

P. ¿La Constitución, en este sentido, es una frustración para Euskadi?

R. Cuando menos es la pérdida de una enorme oportunidad para haber encontrado el significado del engarce del pueblo vasco, dentro del nuevo modelo de Estado.

P. ¿La salida puede ser un amplio estatuto de autonomía?

R. Sí. Creemos que de todas maneras, aunque no sea la fórmula satisfactoria y definitiva, merece la pena luchar por un estatuto de autonomía. En esa dirección hay que moverse, ya que así se contrarrestan mejor las razones que puedan invocarse por quienes apelan a las vías violentas.

P.¿,Es posible una Euskadi libre y en paz, como propone el PNV?

R. Creo que es posible, efectivamente, una Euskadi libre y en paz. Porque lo que no es viable es una Euskadi en paz si no se progresa hacia su autogobierno. De ahí la importancia de que nosotros hayamos puesto en nuestro lema los dos conceptos: libre y en paz.

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