El empresario Ramón Mendoza niega ser agente de la KGB
De falsedad e infamia fue calificada por Ramón Mendoza, conocido hombre de negocios y nombre popular en esferas del deporte (hípica y fútbol), la información aparecida en el último número del semanario Cambio-16, en la que se le acusaba de ser el representante de los servicios de inteligencia de la URSS (KGB) en España. La mencionada revista ha sido secuestrada por la autoridad judicial, que admitió a trámite la querella presentada por el representante legal del señor Mendoza.
La querella fue presentada en el Juzgado de Guardia (el número 18 de los de Instrucción) de Madrid ante el juez...
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De falsedad e infamia fue calificada por Ramón Mendoza, conocido hombre de negocios y nombre popular en esferas del deporte (hípica y fútbol), la información aparecida en el último número del semanario Cambio-16, en la que se le acusaba de ser el representante de los servicios de inteligencia de la URSS (KGB) en España. La mencionada revista ha sido secuestrada por la autoridad judicial, que admitió a trámite la querella presentada por el representante legal del señor Mendoza.
La querella fue presentada en el Juzgado de Guardia (el número 18 de los de Instrucción) de Madrid ante el juez García Ramos, que admitió la misma y tras el dictamen del ministerio fiscal decretó el secuestro de la revista. La querella se ha interpuesto contra el director de la publicación, el autor de la información y la empresa editora de Cambio-16 a efectos de responsabilidades civiles.El señor Mendoza, visiblemente contrariado por la información, declaró a EL PAIS que su actividad en la empresa Prodag, firma dedicada a operaciones de importación-exportación con la URSS, es totalmente lícita y ajena a cualquier servicio de información de potencia extranjera, sea la KEG, la CIA o cualquier otro.
«La mía ha sido y es una labor patriótica. Yo he sido el primero en abrir a España los mercados de los países del Este europeo y por mis actividades han entrado numerosas divisas en nuestro país.» No quiso entrar en las razones que podían existir tras la información de Cambio-16, «para no caer en defectos semejantes a los de la revista. No sé, como no sean los problemas del Real Madrid... En la portada de la revista apareció como vicepresidente del club de fútbol.»
El señor Mendoza, en relación con las afirmaciones concretas de la revista, reconoció haber conversado en múltiples ocasiones con Victor Louis, a quien se atribuyen labores de espionaje para la KBG. «El señor Louis ha estado más de veinte veces en España, en misiones oficiales y oficiosas, y ha mantenido conversaciones no sólo conmigo, sino con múltiples personas, incluidos varios ministros.» Desmiente, sin embargo, los contactos de Promag con la empresa panameña Comaisa, en contra de lo publicado por la revista, y con su presidente, Georges Charbonier.
En el reportaje de Cambio 16 se relata la infiltración del servicio secreto soviético en el mundo empresarial español dedicado a la importación-exportación y se indica que gran parte de los espías soviéticos tienen relación con la empresa Prodag, de la que es presidente Ramón Mendoza.