Las bases del PNV, contrarias a la manifestación antiterrorista

El pleno extraordinario que iba a celebrar ayer el Consejo General Vasco para tratar de la manifestación antiterrorista convocada por el PNV ha sido retrasado hasta el próximo día 19, porque varios de sus miembros no podían acudir a la reunión debido a la premura de la convocatoria.Estas han sido las razones oficiales aducidas por el propio Consejo para aplazar en seis días una reunión que fue convocada el pasado miércoles con carácter de urgencia.

Lo que no resulta fácil de explicar es que hayan sido los consejeros nacionalistas quienes han puesto más dificultades para que el pleno del...

El pleno extraordinario que iba a celebrar ayer el Consejo General Vasco para tratar de la manifestación antiterrorista convocada por el PNV ha sido retrasado hasta el próximo día 19, porque varios de sus miembros no podían acudir a la reunión debido a la premura de la convocatoria.Estas han sido las razones oficiales aducidas por el propio Consejo para aplazar en seis días una reunión que fue convocada el pasado miércoles con carácter de urgencia.

Lo que no resulta fácil de explicar es que hayan sido los consejeros nacionalistas quienes han puesto más dificultades para que el pleno del Consejo se celebrase ayer. Lógicamente, debían ser ellos, como autores de la convocatoria, quienes tuviesen mejor estudiada la estrategia a seguir. Pero se tiene la impresión de que al PNV no le ha gustado la forma en que los socialistas han tratado de derivar el protagonismo hacia el Consejo, al igual que al PSOE pareció desagradarle que una convocatoria de esta naturaleza partiese unilateralmente del PNV.

Por lo que respecta al PNV, decisión de convocar la manifestación ha desorientado a amplios sectores de su militancia. Para explicar los motivos que han llevado a los dirigentes a adoptar una iniciativa de esta naturaleza se celebró el jueves, en Galdácano, una reunión de las juntas municipales de Vizcaya.

Una personalidad cualificada del partido reconocía que el tema había causado una gran sorpresa en la base, aunque al final, y después de una amplia explicación, las juntas municipales quedaron, en versión de un dirigente, «más o menos satisfechas». Según otras fuentes, inicialmente al menos 72 de las ochenta juntas municipales de Vizcaya se habrían manifestado en contra de la iniciativa tomada por el Euskadi Buru Batzar. Todo ello invita a creer que amplios sectores del partido no han aceptado la propuesta de buen grado.