Cartas al director

Discriminación en las multas

La opinión pública debe sensibilizarse ante la falta de coherencia que los guardias municipales tienen al poner multas.El viernes, un guardia municipal me paró en la Casa de Campo para mostrarme su radar, con el que demostraba que yo circulaba a más de cuarenta kilómetros por hora, por lo que debía ponerme la correspondiente multa. Casi a la vez que a mí, otro guardia, también del coche municipal número 242, paró a un taxista y le mostró asimismo un aparato de radar. Sin embargo, tras charlar un rato con él, le dejó marchar diciendo en voz tan alta que pude oírlo: «Vete y no corras tanto.»
...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La opinión pública debe sensibilizarse ante la falta de coherencia que los guardias municipales tienen al poner multas.El viernes, un guardia municipal me paró en la Casa de Campo para mostrarme su radar, con el que demostraba que yo circulaba a más de cuarenta kilómetros por hora, por lo que debía ponerme la correspondiente multa. Casi a la vez que a mí, otro guardia, también del coche municipal número 242, paró a un taxista y le mostró asimismo un aparato de radar. Sin embargo, tras charlar un rato con él, le dejó marchar diciendo en voz tan alta que pude oírlo: «Vete y no corras tanto.»

Cuando terminaron de ponerme la multa a mí pregunté al agente que había parado al taxi que por qué no le había puesto multa al taxista. Contestó precipitadamente que él «no iba a gran velocidad». Y luego, tras vacilar, añadió que en realidad el taxista había parado por propia iniciativa (cuando yo había visto que le obligaban a pararse) para preguntar que dónde estaba el Palacio de la Música y que él le había respondido que en la Casa de Campo no hay ningún palacio de este tipo. Por supuesto, la disculpa no me pareció coherente, por lo que le avisé que había tomado la licencia del taxi a lo que respondió: «Bueno, vale».

Como me parece muy injusto que a igual falta unos lleven castigo y otros, por lo que fuere, no, lo hago saber a ver si, por casualidad, cambia la actitud de los guardias municipales.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En