Que los maestros trabajen más

Debe ser esencial la exigencia -reivindicaciones- de los maestros para haber llegado a cristalizar su postura en esta huelga general.Me hago cargo de que si exigen -entre otras cosas...- más sueldo, será porque se lo merecen y lo necesitan. Pero ni los millones de niños que ahora están sin escuelas, ni los padres, tenemos la culpa de que no haya acuerdo entre la Administración y el profesorado. Y -haya arreglo o no-, mientras tanto los perjudicados son los niños, los padres, etcétera. Y -puesto a pedir...- creo que nosotros también tenemos algo que pedir. Por ejemplo: que se le dé a los maestr...

Debe ser esencial la exigencia -reivindicaciones- de los maestros para haber llegado a cristalizar su postura en esta huelga general.Me hago cargo de que si exigen -entre otras cosas...- más sueldo, será porque se lo merecen y lo necesitan. Pero ni los millones de niños que ahora están sin escuelas, ni los padres, tenemos la culpa de que no haya acuerdo entre la Administración y el profesorado. Y -haya arreglo o no-, mientras tanto los perjudicados son los niños, los padres, etcétera. Y -puesto a pedir...- creo que nosotros también tenemos algo que pedir. Por ejemplo: que se le dé a los maestros todo lo que piden «y más», si fuese necesario..., pero con la condición «de que entren en un marco de trabajo similar al de la mayoría de profesiones "no demasiado privilegiadas..." ». Que su jornada laboral no sea inferior a siete u ocho horas («legal»). Pues a razón de cinco horas diarias, menos las «vacaciones ... », días festivos y menos festivos ... que no hay colegio, ¿cuántas horas -«reales»- trabaja un maestro al año?

¿No les parece que ocho años para alcanzar unos estudios «primarios», son demasiados ...? Creo que si se pudiera convertir -muchas de las horas superfluas- en horas útiles, se ganaría tiempo, provecho y dinero. Esto quiere decir, que el niño pierde demasiado tiempo inútil en la escuela y, por otro lado, cuenta con demasiado tiempo libre para hacer el vago, el golfo, etcétera.

¡Sin olvidar «que la permanencia» nos cuesta dinero ... !

Estoy a favor de las reivindicaciones de los maestros, pero no hay que olvidar que la escuela necesita de muchas cosas importantes para «alumnos y padres».

Así, pues, que le den todo lo que piden y sea necesario... Pero, ¡por favor, pensemos también en los demás ... !