Terence Todman, un diplomático de raza negra, será nombrado embajador de EEUU en Madrid

La confirmación oficial del nombramiento de Terence Todman como embajador norteamericano en Madrid se hará en los próximos días posiblemente porque se espera el reglamentario placet del Gobierno español al nuevo jefe de la delegación diplomática estadounidense. Por el momento, el Departamento de Estado se limita al clásico no comment, y el propio Todman dijo no saber su nuevo destino diplomático.Todman, de 52 años, es el funcionario de raza negra que ocupa el más alto nivel en el Departamento de Estado. Fue embajador en Chad, Guinea y Costa Rica, y, cuando Jimmy Carter llegó al p...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La confirmación oficial del nombramiento de Terence Todman como embajador norteamericano en Madrid se hará en los próximos días posiblemente porque se espera el reglamentario placet del Gobierno español al nuevo jefe de la delegación diplomática estadounidense. Por el momento, el Departamento de Estado se limita al clásico no comment, y el propio Todman dijo no saber su nuevo destino diplomático.Todman, de 52 años, es el funcionario de raza negra que ocupa el más alto nivel en el Departamento de Estado. Fue embajador en Chad, Guinea y Costa Rica, y, cuando Jimmy Carter llegó al poder, en enero de 1977, le encargó la dirección de la política norteamericana hacia América Latina.

Durante el año largo de su gestión, Terence Todínan fue enfrentándose progresivamente con aquellos sectores de la Administración Carter que ponen mayor énfasis en la política de derechos humanos, quienes acusaron a Todman de no poner demasiado entusiasmo en su tarea y de mostrar una actitud en exceso conciliadora hacia las dictaduras militares latinoamencanas.

Diferencias con Vance

Las divergencias entre el subsecretario adjunto para Latinoamérica y otros altos funcionarios del Departamento de Estado se agravaron en febrero pasado, cuando Terence Todman, en un discurso pronunciado en Nueva York, enumeró diez cosas que no debían hacerse para implantar la política pro derechos humanos del presidente Carter. Entre otras cosas, Todman dijo entonces que no debía esperarse que los Gobiernos dictatoriales de Latinoamérica cambiasen de la noche a la mañana y que no debía creerse que la verdad está sólo en las declaraciones de la oposición.

Recientemente, Terence Todman preparó un documento confidencial para el Consejo Nacional de Seguridad en el que exponía su visión de la política de Washington hacia América Latina. Al parecer, en dicho informe Todman pedía menos retórica y un acercamiento más equilibrado hacia las dictaduras militares latinoamericanas, pero el documento fue ignorado por el Consejo Nacional de Seguridad, lo que aumentó aún más las diferencias.

El enfrentamiento con Warren Christopher, el número dos del Departamento de Estado, habría colocado a Todman en una situación incómoda y le habría obligado a pedir su cese como subsecretario adjunto para Latinoamérica. A esto se uniría también el deseo de Todman de retirarse de la esfera latinoamericana y ocupar una embajada de importancia, como se considera la de Madrid en el servicio diplomático norteamericano.

El embajador en Venezuela, Viron Vaky, será muy probablemente el nuevo subsecretario encargado de América Latina. No se conoce, por el momento, cual será el nuevo destino del actual embajador norteamericano en Madrid, Wells Stabler, otro diplomático de carrera que fue confirmado en su puesto por el Gobierno de Jimmy Carter.

Habla castellano

Terence Todman habla correctamente el castellano, aunque según su historial profesional no ha trabajado en temas españoles y su conocimiento de nuestro país debe ser más bien escaso. Fuentes del Gobierno norteamericano describieron a Todman en el diario Washington Post de ayer como un hombre «moderado, pragmático y destinado a alcanzar resultados prácticos».

Este pragmatismo de Todman habría chocado con los puntos de vista de los altos cargos políticos del Departamento de Estado, como la coordinadora para la política de derechos humanos, Patricia Derian, y el experto en temas latinoamericanos del Consejo Nacional de Seguridad, Robert Pastor, que apoyan una línea de mayor dureza hacia las dictaduras latinoamericanas que la seguida por Todman.

Archivado En