Los enfermos reivindican un trato más humano

Enfermos, personal sanitario, enfermeras y celadores del hospital psiquiátrico Alonso Vega se han constituido en asamblea permanente desde el jueves para debatir los problemas que les afectan, extender su conocimiento a aquellos que aún no los conozcan y, por último, entablar negociaciones con la dirección del centro, que depende, en última instancia, de la Diputación Provincial.El 9 de marzo, el comité de empresa ya emitió un comunicado en el que aludía a la necesaria modificación de unas estructuras asistenciales arcaicas y a provocar un debate sobre las, alternativas que puedan ponerse en p...

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Enfermos, personal sanitario, enfermeras y celadores del hospital psiquiátrico Alonso Vega se han constituido en asamblea permanente desde el jueves para debatir los problemas que les afectan, extender su conocimiento a aquellos que aún no los conozcan y, por último, entablar negociaciones con la dirección del centro, que depende, en última instancia, de la Diputación Provincial.El 9 de marzo, el comité de empresa ya emitió un comunicado en el que aludía a la necesaria modificación de unas estructuras asistenciales arcaicas y a provocar un debate sobre las, alternativas que puedan ponerse en práctica para llegar a una asistencia más eficaz y humana, acabando con la actual «incomunicación y falta de libertad» en la que se desenvuelve la vida cotidiana de los internados.

El jueves; a media tarde, cinco de estos últimos convocaron una asamblea para plantear su situación personal. La convocatoria tuvo un éxito inmediato y llegaron a reunirse del orden de las doscientas o 250 personas. Ayer, viernes, a las diez de la mañana, el número de participantes ascendió a 350 ó cuatrocientos. En un principio, las cinco personas convocantes expusieron sus problemas particulares, que se cifraban, entre otros, en reivindicar una labor asistencial a base de métodos terapéuticos, y no como ahora, basada en los productos relajantes, que lo único que hacen -idea en la que coincidieron muchos más- es adormecerlos.

A lo largo de las asambleas afloraron una serie de reivindicaciones más de tipo general y que abarcan, desde los más mínimos detalles de cada día, que para ellos, en cambio, tienen una importancia decisiva, hasta cambiar esencialmente la estructura de la asistencia. Se habló de abaratar los artículos de consumo de la cafetería, dado que los internados suelen tener disposiciones económicas muy bajas, de permitir que enfermos de diferente sexo puedan reunirse en las horas libres en las mismas instalaciones, de que se abra el taller de laborterapia y la biblioteca, cerrados actualmente, y, en general, procurar una asistencia que ayude efectivamente a su reinserción social.

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