Manifestación en Sevilla contra la ola de violaciones

Varios miles de personas, en su mayoría mujeres, se concentraron a mediodía de ayer ante el Gobierno Civil de Sevilla para protestar por la ola de violaciones que se han producido en la capital de la provincia recientemente, atendiendo al llamamiento de la Asociación Democrática de la Mujer Andaluza (ADMA), varios partidos de izquierda y centrales sindicales. Al mismo tiempo se han registrado paros en algunos centros universitarios y asambleas y recogidas de firmas en varias empresas.Una comisión de manifestantes se entrevistó con el secretario del Gobierno Civil, Mario López, a quien hizo ent...

Varios miles de personas, en su mayoría mujeres, se concentraron a mediodía de ayer ante el Gobierno Civil de Sevilla para protestar por la ola de violaciones que se han producido en la capital de la provincia recientemente, atendiendo al llamamiento de la Asociación Democrática de la Mujer Andaluza (ADMA), varios partidos de izquierda y centrales sindicales. Al mismo tiempo se han registrado paros en algunos centros universitarios y asambleas y recogidas de firmas en varias empresas.Una comisión de manifestantes se entrevistó con el secretario del Gobierno Civil, Mario López, a quien hizo entrega de un escrito solicitando la adopción de medidas de seguridad en barrios y centros de trabajo y la consideración de la violación como un delito contra la libertad y la intimidad.

La Jefatura Superior de Policía, por su parte, ha hecho público un comunicado en el que, tras recordar que la ADMA es una asociación no legalizada, señalan que sólo se han recibido dos denuncias, una por supuesta violación y otra por intento, habiéndose detenido en ambos casos a los presuntos autores, que han sido puestos a disposición de la autoridad judicial.

La nota policial termina aconsejando a la opinión pública, y especialmente a la mujer sevillana, «que no den el más mínimo crédito a las exageradas y en ocasiones gratuitas informaciones, puestas en circulación con el solo objeto de producir una psicosis de terror entre la población femenina».