Rafael Termes: "El momento actual es bueno para que se produzcan fusiones bancarias"

El momento actual es bueno para que se produzcan fusiones bancarias, siempre que las entidades resultantes sean más eficaces que las anteriormente separadas. En estos términos se ha pronunciado Rafael Termes, presidente de la Asociación Española de Banca Privada (Asoban), a Europa Press.

Sobre este mismo tema insiste y pone de relieve que en un momento como este de apertura, las fusiones son buenas, ya que cuando existe una mayor competencia hay una mayor posibilidad de fusión. «Estas fusiones se pueden realizar con los bancos medianos y pequeños. No veo, sin embargo, ningún movimiento ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El momento actual es bueno para que se produzcan fusiones bancarias, siempre que las entidades resultantes sean más eficaces que las anteriormente separadas. En estos términos se ha pronunciado Rafael Termes, presidente de la Asociación Española de Banca Privada (Asoban), a Europa Press.

Sobre este mismo tema insiste y pone de relieve que en un momento como este de apertura, las fusiones son buenas, ya que cuando existe una mayor competencia hay una mayor posibilidad de fusión. «Estas fusiones se pueden realizar con los bancos medianos y pequeños. No veo, sin embargo, ningún movimiento de fusión entre los grandes bancos.»Con respecto a la política económica del Gobierno, el señor Termes apunta que siempre ha reiterado este apoyo por parte de la Banca, «ya que la política económica establecida es la única posible en estos momentos. Sobre las discrepancias de algún banquero, manifiesta que la opinión personal de un banquero tiene menor trascendencia que la decisión firme y decidida de la Banca, como gremio, de apoyar la ejecución de la política económica del Gobierno». En estos términos el presidente de Asoban se lo puso de relieve al presidente Suárez en la reunión mantenida entre ambos.

La entrada de la Banca extranjera es también tema de análisis y, en este sentido, señala que la Banca no tiene ningún inconveniente a la presencia de la Banca extranjera, si bien es de justicia aplicar una norma de reciprocidad. «Corresponde al Gobierno señalar y graduar la entrada de bancos. Esta graduación es importante, ya que la entrada en bloque podría hacer mucho daño. Naturalmente interesa que vengan los grandes bancos internacionales.»

El levantamiento del secreto bancario es abordado igualmente por Rafael, Termes. «Estamos en un régimen parlamentario, y lo que sale del Parlamento hay que aceptarlo. El banquero, como un español más, puede presentar enmiendas a través de parlamentarios; pero, una vez aprobada la ley, no tenemos nada que discutir. La Banca entiende que el levantamiento del secreto bancario favorece la transparencia fiscal, aunque el trabajo que llevará esta medida consigo (envío de 51 millones de datos sobre los números de las cuentas corrientes y el nombre de los cuentacorrentistas) no compensará los efectos que se persigue. Es decir, aunque estemos de acuerdo en el fondo, la forma elegida quizá no sea la adecuada, porque se va a crear una gran burocracia que pudiera haber sido evitada si la ley hubiera establecido simplemente que, a requerimiento de las autoridades fiscales, los bancos vendrían obligados a facilitar todos los datos de sus cuentacorrentistas, pero sin tener que estar obligados a priori a mandar unas interminables listas.»

Sobre la política crediticia bancaria, el señor Termes apunta que durante el próximo año, la Banca actuará como lo ha venido haciendo en 1977, en la conciencia clara de los pactos de la Moncloa: « Distribuirá, con sus criterios de apreciación de riesgo, los créditos que la autoridad monetaria considere que deben darse para seguir la lucha contra la inflación. Las disponibilidades líquidas se situarán algo por encima de un crecimiento del 17 %.»

En opinión del presidente de Asoban, el cumplimiento del actual plan económico supone que en el primer semestre de 1978 lo vamos a seguir pasando mal. El crédito crecerá menos que los precios, y sólo en la segunda mitad del año el crédito crecerá por encima de los precios.

«En el primer semestre, la crisis económica causará un daño sensible a la industria española. Algunas empresas no superarán ese período, aunque yo creo que su número será menor que el que se teme. Habrá caídas importantes en el trayecto de superación de la crisis, pero no se puede sanear la economía sin traumas.»

Archivado En