Asociación de Hombres Separados: no al proyecto de ley de divorcio

La Asociación de Hombres Separados, de Barcelona, ha enviado un telegrama de adhesión a las feministas que se encerraron el miércoles en la basílica de San Miguel, contra el proyecto de ley de Divorcio elaborado por la Comisión de Codificación.La Asociación de Hombres Separados, recientemente legalizada, agrupa a 350 miembros, una pequeña parte de los separados que residen en Barcelona. Se manejan cifras muy elevadas sin apoyo estadístico serio, pero que, por otra parte, nunca se desmienten.

Los argumentos de Ia Asociación contra el proyecto de ley son similares a los que esg...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La Asociación de Hombres Separados, de Barcelona, ha enviado un telegrama de adhesión a las feministas que se encerraron el miércoles en la basílica de San Miguel, contra el proyecto de ley de Divorcio elaborado por la Comisión de Codificación.La Asociación de Hombres Separados, recientemente legalizada, agrupa a 350 miembros, una pequeña parte de los separados que residen en Barcelona. Se manejan cifras muy elevadas sin apoyo estadístico serio, pero que, por otra parte, nunca se desmienten.

Los argumentos de Ia Asociación contra el proyecto de ley son similares a los que esgrimen las feministas:

«La normativa de este proyecto alarga extraordinariamente los trámites jurídicos, con lo que se agravan las tensiones entre los cónyuges, los problemas con los hijos, etcétera», apunta Julio Cadaval, presidente de la asociación.

«Una vez conseguida la separación, que puede costar hasta cinco años, si no hay un acuerdo por cuestiones de intereses patrimoniales, sigue el procedimiento de divorcio en los tribunales civiles.

En total, las tramitaciones de divorcio costarán más tiempo y más dinero que la separación de antes. Además, parece ser que las normativas dan prioridad a las causas presentadas en tribunales eclesiásticos extranjeros, con lo que se mantiene la discriminación económica.» Según el señor Cadaval, el proyecto de ley de Divorcio está inspirado en el picolo divorcio que se promulgó en Italia y allí los procesos judiciales pueden durar hasta quince años.

En el caso de los divorciados de hecho, la propuesta de la asociación es que cuando la separación rebase un tiempo prudencial que demuestre la irrecuperabilidad del matrimonio, se simplifiquen al máximo los trámites.

«Aunque, a veces, se nos acuse de machistas -comenta el señor Cadaval-, el primer objetivo de la asociación es paliar las tiranteces entre los hombres y mujeres que se separan. En este sentido, la ley de Divorcio de la República era mucho más eficaz que el presente proyecto de ley. »

Archivado En