Josep Tarradellas llegó ayer a Madrid
«Siento una gran alegría por este recibimiento. Me doy cuenta de que en España existe ya una democracia, que es un hecho que tenemos que agradecer al Rey y al Gobierno», dijo ayer Josep Tarradellas a su llegada al aeropuerto de Madrid, procedente del de Tours, ciudad próxima al pueblecito francés de Saint Martín-le-Beau, donde el presidente de la Generalitat de Cataluña ha pasado la mayor parte de sus casi cuarenta años de exilio.Visiblemente emocionado, ante una verdadera nube de fotógrafos y cámaras de televisión, el señor Tarradellas fue recibido al pie de la escalerilla del avión (un Hawke...
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«Siento una gran alegría por este recibimiento. Me doy cuenta de que en España existe ya una democracia, que es un hecho que tenemos que agradecer al Rey y al Gobierno», dijo ayer Josep Tarradellas a su llegada al aeropuerto de Madrid, procedente del de Tours, ciudad próxima al pueblecito francés de Saint Martín-le-Beau, donde el presidente de la Generalitat de Cataluña ha pasado la mayor parte de sus casi cuarenta años de exilio.Visiblemente emocionado, ante una verdadera nube de fotógrafos y cámaras de televisión, el señor Tarradellas fue recibido al pie de la escalerilla del avión (un Hawker, aerotaxi de la compañía privada Alpa) por el ministro de Trabajo y diputado de UCD por Barcelona, Manuel Jiménez de Parga (que ostentaba la representación de todo el Gobierno), por el asesor del presidente, Salvador Sánchez Terán (el hombre que llevó la última ronda de negociaciones con Tarradellas) y por el pleno de la Comisión Permanente de la Asamblea de Parlamentarios de Cataluña.
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"El restablecimiento de la Generalitat ha sido un triunfo de todos"
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A su llegada a la sala de prensa, acompañado por el ministro de Trabajo y el asesor presidencial, el señor Tarradellas contestó, generalmente con evasivas, a las preguntas que se le hicieron en la rueda de prensa que se celebró a continuación de su llegada.
«Los problemas que van a presentársele a la Generalitat son difíciles, pero se resolverán porque tenemos fe en nuestro pueblo», comenzó diciendo. «No es hoy, con mi regreso a España, cuando me siento verdaderamente presidente de la Generallitat de Cataluña. Me he sentido presidente desde 1954.» A otra pregunta sobre el restablecimiento de Ía Generalitat contestó: «No me siento demasiado contento, ni creo que el presidente Suárez tampoco. A éste le parece demasiado; a mí, demasiado poco. En cualquier caso es un triunfo de todos, del Rey, de Suárez, de Sánchez Terán, de los parlamentarios catalanes, de Cataluña y mío propio. Siempre he creído que la Generalitat volvería. Nunca me ha faltado la fe», añadió.
Finalmente dijo que había una plne identificación entre los parlamentarios catalanes y él, «porque desde hace unos años nos veníamos reuniendo, y los acuerdos los tomamos siempre por unanimidad. Es natural que haya habido algunas divergencias, pero somos demócratas y, como catalanes, muy tolerantes y pragmáticos. Pero en el fondo siempre hemos estado de acuerdo y lo seguiremos estando».
Antes de la rueda de prensa, y mientras saludaba uno a uno a todos los parlamentarlos catalanes, el señor Tarradellas abrazó a Josep Benet (a quien había destituido de la comisión negociadora el pasado día 30 de agosto por unas declaraciones de éste a un periódico de Barcelona, contrarias a la actitud negociadorade Tarradellas), zanjando de esta manera la cuestión Benet.
Mientras Josep Tarradellas abandonaba el aeropuerto en un coche particular en compañía de su esposa y del señor Sánchez Terán, y el ministro de Trabajo lo hacía en su coche oficial, el grupo de los parlamentarios catalanes y unas cincuenta personas que portaban alguna pequeña bandera catalana entonaron el himno Els ssegadors.
El señor Tarradellas, que se hospedará en el hotel Palace (donde recibirá algunas visitas de políticos, entre ellos los señores Tierno Galván y López Rodó), visitará hoy a los vicepresidentes Gutiérrez Mellado y Abril Martorell, al presidente del Tribunal Supremo y a los de las Cortes, Congreso y Senado, al tiempo que asistirá a una reunión de la Comisión de Urgencia Legislativa. El sábado será recibido por el Rey y el presidente Suárez, y el domingo emprenderá viaje a Barcelona.