Apareció el cadáver de la escritora italiana Luisa Spagnoli

El cadáver de la escritora y periodista Luisa Spagnoli, fue encontrado ayer en el fondo de un barranco del monte Tana, provincia de Bolzario, en el norte de Italia.Luisa Spagnoli, 48 años, famosa en el mundillo romano por sus tertulias literarias y colección de arte moderno, sobrina de la homónima creadora de modas femeninas, se encontraba desde el martes de la semana pasada en Val Gardena. Había sido invitada a pasar unos días en el viejo castillo medieval de Fischburg por su amigo el barón romano Giorgio Franchetti, ex cuñado de Henri Fonda. El viernes pasado había desaparecido inexplicablem...

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El cadáver de la escritora y periodista Luisa Spagnoli, fue encontrado ayer en el fondo de un barranco del monte Tana, provincia de Bolzario, en el norte de Italia.Luisa Spagnoli, 48 años, famosa en el mundillo romano por sus tertulias literarias y colección de arte moderno, sobrina de la homónima creadora de modas femeninas, se encontraba desde el martes de la semana pasada en Val Gardena. Había sido invitada a pasar unos días en el viejo castillo medieval de Fischburg por su amigo el barón romano Giorgio Franchetti, ex cuñado de Henri Fonda. El viernes pasado había desaparecido inexplicablemente durante una breve excursión con la hija del barón Marionne, una niña de nueve años, y la institutriz irlandesa Brigitte. El mozo de un bar cercano afirma que el grupo iba acompañado de un joven rubio de unos dieciocho años.

Durante tres días han sido inútiles los esfuerzos hechos por las autoridades para aclarar lo que toda la prensa define como «novela policial». Como suele ocurrir en estos casos, desde el primer momento se barajaron toda clase de hipótesis. La del secuestro fue en seguida descartada por las autoridades, dado que en aquella zona montañosa es muy difícil transitar en coche. No obstante, no han faltado las llamadas anónimas que lo reivindicaban por razones políticas: las Brigadas Rojas la hubieran matado si el ministro de la Defensa, Víctor Lastancio, no dimitía; los Núcleos Armados Proletarios (NAP) querían el traslado a otra cárcel de dos de sus activistas. Los investigadores se inclinan por ahora hacia la hipótesis de la desgracia. Por ser Luisa Spagnoli una mujer gruesa, de mucho peso, un simple resbalón podría haberle sido fatal. Para el suicidio no había tampoco motivos lógicos suficientes.

De todos modos, se pone también de relieve que la periodista fue declarada recientemente heredera universal del imperio financiero de su padre, Mario Spagnoli, muerto hace un par de meses. Sus dos hermanos Mirella y Gino -este último dirige la casa de modas- han impugnado el testamento de Spagnoli, conocido sobre todo como fundador de la industria de dulces Perugina.

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