Cartas al director

Más austeridad

Soy apolítico y por esta razón creo poder observar mejor, desde mi burladero, cuanto sucede en el ruedo político.Recientemente he estado descansando en el Parador Nacional de Turismo Castillo de Sigüenza (Guadalajara) durante dos días, concretamente el 14 y 15 del mes actual, y he salido defraudado porque no pude ver ninguna de las instalaciones del mismo, que me dijeron eran dignas de admirar. Los motivos, según los empleados del establecimiento, eran las reuniones que iban a celebrar los dirigentes del PSOE. Y, para este fin, el gran salón de reuniones, aun estando todavía vacío, estaba cerr...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Soy apolítico y por esta razón creo poder observar mejor, desde mi burladero, cuanto sucede en el ruedo político.Recientemente he estado descansando en el Parador Nacional de Turismo Castillo de Sigüenza (Guadalajara) durante dos días, concretamente el 14 y 15 del mes actual, y he salido defraudado porque no pude ver ninguna de las instalaciones del mismo, que me dijeron eran dignas de admirar. Los motivos, según los empleados del establecimiento, eran las reuniones que iban a celebrar los dirigentes del PSOE. Y, para este fin, el gran salón de reuniones, aun estando todavía vacío, estaba cerrado a cal y canto. Tampoco pude ver la capilla, ya que su antesala la habían transformado en el comedor privado de los reunidos, quizá para que nadie pudiese constatar la exquisitez de las comidas y el sibaritismo de las bebidas.

Después de ver todo esto, teniendo en cuenta que el precio de la estancia, en habitación normal, es de 1.560 pesetas, con desayuno, me pregunto: ¿es esto democracia?, ¿es esto austeridad?, ¿es así como se da de comer a tanto parado? y ¿es esto apretarse el cinturón? Pues que venga Dios y lo vea.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En