Prensa

Andreu Claret: "No está clara mi readmisión en Cambio 16"

«Pese a diversas informaciones, todavía no está clara mi posible readmisión en Cambio-16» -manifestó a EL PAIS Andreu Claret, hasta fecha reciente «redactor para Cataluña» de la mencionada revista.Andreu Claret fue despedido después de que hubiese remitido cartas a diarios barceloneses alusivas a informaciones aparecidas en Cambio-16 y que, según Claret, no eran obra suya ni de sus compañeros en la delegación barcelonesa de la revista.

Aquellas informaciones, Claret las califica de «difamatorias para el senador Lluis M. Xirinacs y el PSUC, y perjudicales para el «Pacte Dem...

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«Pese a diversas informaciones, todavía no está clara mi posible readmisión en Cambio-16» -manifestó a EL PAIS Andreu Claret, hasta fecha reciente «redactor para Cataluña» de la mencionada revista.Andreu Claret fue despedido después de que hubiese remitido cartas a diarios barceloneses alusivas a informaciones aparecidas en Cambio-16 y que, según Claret, no eran obra suya ni de sus compañeros en la delegación barcelonesa de la revista.

Aquellas informaciones, Claret las califica de «difamatorias para el senador Lluis M. Xirinacs y el PSUC, y perjudicales para el «Pacte Democratic per Catalunya».

Las informaciones optimistas respecto a una rápida readmisión de Andreu Claret se basaban en que la Magistratura de Trabajo de Barcelona había declarado improcedente el despido y que, posteriormente, ante representantes sindicales de prensa catalanes, el presidente de la empresa periodística editora de la revista había firmado un comunicado alusivo a una «eventual» readmisión de Claret, que supeditaba a una reparación de los daños «que haya podido sufrir ante algunos sectores la veracidad informativa de Cambio- 16».

Ahora Claret señala a EL PAIS que en la sentencia que resolvía su caso «el magistrado no supeditó la improcedencia del despido a ninguna iniciativa, perdón o rectificación por mi parte». Claret añade también que «dictada la sentencia es a Cambio-16 a quien corresponde la última palabra, ya que la legislación laboral vigente permite, en última instancia, el libre despido, pero partiendo de la sentencia, no de una iniciativa mía que contradecería mi actuación anterior, pondría en cuestión la solidaridad de los trabajadores de prensa y supondría una desautorización del magistrado, que ha hecho más libre, con su sentencia, el ejercicio de nuestra profesión».

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