Encierro en la empresa sevillana Alarcón Hornillo

Ayer cumplieron ocho días de reclusión voluntaria en la propia factoría los 72 trabajadores de la empresa Juan Alarcón Hornillo, instalada en la vecina población de Alcalá de Guadaira. El encierro se inició el lunes de la semana pasada, cuando los obreros advirtieron a su llegada a la fábrica que faltaba parte de la maquinaria de la misma.Según los trabajadores, la crisis de Alarcón Hornillo ha sido provocada por una deficiente dirección que desde hace seis meses viene tomando medidas encaminadas al cierre de la empresa y que han culminado con la venta de la referida maquinaria.

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Ayer cumplieron ocho días de reclusión voluntaria en la propia factoría los 72 trabajadores de la empresa Juan Alarcón Hornillo, instalada en la vecina población de Alcalá de Guadaira. El encierro se inició el lunes de la semana pasada, cuando los obreros advirtieron a su llegada a la fábrica que faltaba parte de la maquinaria de la misma.Según los trabajadores, la crisis de Alarcón Hornillo ha sido provocada por una deficiente dirección que desde hace seis meses viene tomando medidas encaminadas al cierre de la empresa y que han culminado con la venta de la referida maquinaria.

Un portavoz de la empresa, sin embargo, ha señalado a EL PAIS que no se tiene intención de cerrar la fábrica y que las máquinas que han sido vendidas eran sobrantes de otra nave industrial que poseía la empresa con anterioridad. Mientras sigue el encierro, los obreros han presentado en Magistratura de Trabajo sendas demandas en salvaguarda de sus derechos laborales.

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