El PSOE aspira a movilizar 100.000 interventores
El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) aspira a tener dos interventores por cada mesa electoral el día de las elecciones. Ello supondría la movilización de unas 100.000 personas, sólo para el día 15 de junio, aunque buena parte de ellas serán utilizadas durante la campaña electoral en el trabajo de propaganda, servicio de orden de los mítines y otras funciones.
El problema del control de las elecciones es uno de los que más preocupan a este partido. Tras las denuncias de interferencias de las autoridades en distintas provincias, respecto a la realización de mítines y reparto de pro...
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El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) aspira a tener dos interventores por cada mesa electoral el día de las elecciones. Ello supondría la movilización de unas 100.000 personas, sólo para el día 15 de junio, aunque buena parte de ellas serán utilizadas durante la campaña electoral en el trabajo de propaganda, servicio de orden de los mítines y otras funciones.
El problema del control de las elecciones es uno de los que más preocupan a este partido. Tras las denuncias de interferencias de las autoridades en distintas provincias, respecto a la realización de mítines y reparto de propaganda, en la actualidad hay algunas precampañas orientadas a contrarrestar la posible influencia de actitudes caciquiles en la España rural.Concretamente, la candidatura del PSOE en Orense, que dirige Modesto Seara, tiende a explicar en sus mítines la importancia de que en esta ocasión vayan a instalarse cabinas en todos los colegios electorales: de este modo, el presunto cacique de turno no tiene por qué saber lo que vota cada persona.
Por otra parte, el secretario de organización del PSOE, Alfonso Guerra, ha facilitado el dato -en declaraciones a Cifra- de que este partido invertirá quinientos millones de pesetas en su campaña electoral. Hasta ahora, ningún banco ha concedido créditos para ello, aunque las perspectivas son buenas en algunos casos. Otros métodos de financiación serán bonos, cuotas extraordinarias de los militantes y venta de objetos y recuerdos del partido, así como las cantidades que perciba del Estado, proporcionalmente a los resultados