Bilbao: dos detenciones en relación con agresiones de extrema derecha

Dos jóvenes han sido detenidos en relación con los sucesos protagonizados el pasado día 24 de abril en Bilbao por un grupo de seguidores del presidente de Fuerza Nueva, Blas Piñar. El incidente más grave ocurrió en la calle Campo de Volantín (véase EL PAIS del 26 de abril), donde fue apuñalado José Luis Camarón, de dieciséis años de edad.

Algunos testigos de los graves enfrentamientos registrados en la zona, mientras en un hotel próximo tenía lugár una comida en homenaje del señor Piñar, registraron las matrículas de dos autobuses a los que subieron la mayoría de los jóvenes piña...

Dos jóvenes han sido detenidos en relación con los sucesos protagonizados el pasado día 24 de abril en Bilbao por un grupo de seguidores del presidente de Fuerza Nueva, Blas Piñar. El incidente más grave ocurrió en la calle Campo de Volantín (véase EL PAIS del 26 de abril), donde fue apuñalado José Luis Camarón, de dieciséis años de edad.

Algunos testigos de los graves enfrentamientos registrados en la zona, mientras en un hotel próximo tenía lugár una comida en homenaje del señor Piñar, registraron las matrículas de dos autobuses a los que subieron la mayoría de los jóvenes piñaristas. Las matrículas (S-4010-B y S-1175-D) han sido puestas en conocimiento del juez encargado del caso. Parece ser que algunos de los jóvenes ocupantes de estos autobuses fueron vistos ese mismo domingo, sobre las 6.30 de la tarde, en la localidad santanderina de Castro Urdiales, vistiendo ropa normal en lugar de las camisas azules que llevaban en la capital vizcaína.

Sobre las dos detenciones practicadas no se ha facilitado información oficial alguna, si bien la familia cree saber que se trata de dos muchachos de Vitoria y Bilbao, uno de dieciséis años y el otro de diecinueve. La familia de José Luis Camarón -que permanece todavía en el hospital- presentó denuncia en su día, pero hasta el momento no ha recibido ninguna notificación judicial para personarse en el sumario, acusación, acusadores privados.

Se sabe, por otra parte, que el gobernador Civil de Vizcaya dio instrucciones muy concretas a la policía para que investigasen los hechós a fondo, en la línea de imparcialidad ideológica que el propio director general de Seguridad ha preconizado públicamente.