Absoluta falta de pulso
Terminó la mini-semana bursátil en la misma línea de los últimos días: poco negocio, dominio del papel y cesiones generalizadas.Si había una nota agradable en el salón de operaciones era la fluidez del transito por el mismo, muy disminuido de concurrentes. Por los demás, como decimos, nada nuevo a no ser un mayor debilitamiento general, que ya no respeta ni a los valores punteros, y si no ahí está Dragados que cede diecisiete enteros al arrastrar papel.
La debilidad quedó patente desde el primer corro, donde Campsa y Tabacalera no pudieron casar operación por falta de contrapartida.
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Terminó la mini-semana bursátil en la misma línea de los últimos días: poco negocio, dominio del papel y cesiones generalizadas.Si había una nota agradable en el salón de operaciones era la fluidez del transito por el mismo, muy disminuido de concurrentes. Por los demás, como decimos, nada nuevo a no ser un mayor debilitamiento general, que ya no respeta ni a los valores punteros, y si no ahí está Dragados que cede diecisiete enteros al arrastrar papel.
La debilidad quedó patente desde el primer corro, donde Campsa y Tabacalera no pudieron casar operación por falta de contrapartida.
Escasa animación en los corros eléctricos, correspondiendo los recortes más notables a Unión (-2,25) e Iberduero (- 1,50).
En Construcción e Inmobiliarias, además del bajón mencionado, desmerecen Urbis, Eurobuilding y Vallehermoso.
Sigue la irregularidad en Bancos, aunque cada día son menos los que suben. Los grandes, Bilbao, Central, Banesto, Vizcaya, Popular, Santander, Hispano, registran cesiones.
En los Industriales repite Urquijo y suben Bankunión y Occidental. De los títulos típicamente industriales hay poco que destacar porque tanto los químicos como los minero-siderúrgicos, en general, goteaban. Una excepción, Olarra, que mejora nueve puntos. En el otro extremo, Ibys pierde 43.
Trasmediterránea, que acumulaba papel, opera, por fin, a 110,50 con pérdida de 19,50 y gran contratación, ya que negoció más de 17,2 millones nominales.
Al cierre, trece valores con papel y sólo tres -no representativos-, con dinero.