Los empresarios españoles no dan previsiones para 1977

Los numerosos hombres de empresas y economistas que asistieron a la reunión que APD habla montado en torno a una serie de prestigiosos empresarios para que éstos descubriesen los velos de nuestro futuro económico, se debieron quedar un tanto decepcionados porque, con alguna rara excepción, nuestros hombres de empresa, simplemente, no ven la economía española en 1977.

Cinco empresarios de primera fila en nuestro país, como Claudio Boada, Jaime Carvajal, Gregorio Millán, José Luis Díaz Fernández y Raúl Celestino, a quienes hay que añadir el nombre del gobernador del Banco de España, José ...

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Los numerosos hombres de empresas y economistas que asistieron a la reunión que APD habla montado en torno a una serie de prestigiosos empresarios para que éstos descubriesen los velos de nuestro futuro económico, se debieron quedar un tanto decepcionados porque, con alguna rara excepción, nuestros hombres de empresa, simplemente, no ven la economía española en 1977.

Cinco empresarios de primera fila en nuestro país, como Claudio Boada, Jaime Carvajal, Gregorio Millán, José Luis Díaz Fernández y Raúl Celestino, a quienes hay que añadir el nombre del gobernador del Banco de España, José María López de Letona, fueron convocados por la Asociación para el Progreso de la Dirección con el fin claro y concreto de que expusiesen sus ideas sobre el probable deambular de la economía española en 1977.Analizando las exposiciones de cada uno de ellos por riguroso orden de intervención, pocos fueron los que se atrevieron a predecir el desarrollo de las magnitudes económicas durante el año que acaba de comenzar, quizás porque en este mismo lugar, hace poco más o menos un año, se fijaban como objetivos para el año 1976 -como recordó el señor López de Letona- alcanzar un crecimiento del PNB en torno al 4%, conseguir que la tasa de inflación se situara por debajo de la correspondiente a 1975 (14%) y limitar el déficit de la balanza de pagos por cuenta corriente a niveles próximos a 2.500 millones de dólares, previsiones que no han resultado demasiado acertadas.

El señor López de Letona señaló que dado el éxito alcanzado por la política monetaria dictada por el Banco de España durante los últimos meses de 1976, el mismo criterio seguido orientará la política monetaria para 1977, en la que «seguimos manteniendo los mismos objetivos de crecimiento de las disponibilidades líquidas vigentes en el último trimestre de 1976».

Los resultados de la política monetaria expansiva adoptada por el Gobierno para el último trimestre del año, utilizando datos provisionales, permiten, según el señor López de Letona, apreciar que en el último trimestre del año el crédito bancario aumento en 343.000 millones de pesetas, con una desviación menor del 5% sobre la previsión efectuada de 327.000 millones y referidas al conjunto del año.

Otra de las previsiones realizadas por el gobernador del Banco de España señala un crecimiento del PIB para 1975 del 3,5%, aunque ello exigiría de entrada un comportamiento algo más dinámico de la inversión de lo que ha venido observándose a finales de año.

Claudio Boada, presidente de la compañía Ford España, tuvo una intervención ilustrativa, a lo largo de la cual dio un repaso a la marcha del sector durante el año que acaba de finalizar y a los principales aconteceres que perturbaron su marcha, como fueron el descenso de ventas y exportaciones de los vehículos industriales, la declaración de libertad de precios para el sector, la modificación al alza del impuesto municipal sobre circulación de vehículos, el desarrollo de la contingentación...

El señor Boada pidió entre otras cosas, medidas de apoyo a la exportación, una ley de Transportes, con todas sus consecuencias, y coordinación y reglas de juego generales para las empresas, que componen la ANFAC (Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones) y Sernauto (Asociación de la Industria Auxiliar).

Jaime Carvajal, consejero director general del Banco Urquijo, puso de manifiesto que el aumento de las disponibilidades líquidas de la Banca en 1977 puede ser del 18,5% y del crédito del 19%. Anunció, igualmente, que 1977 será un año en el que el crecimiento del crédito va a estar seriamente controlado dado que es inevitable en un contexto de medidas antiinflacionistas.

Gregorio Millán, presidente de Sercobe expuso tres soluciones para conseguir el relanzamiento del sector de bienes de equipo: el relanzamiento de los diversos proyectos públicos y privados que se han visto aplazados y que se cifran en una inversión próxima a los 500.000 millones de pesetas; la ampliación del volumen y cauces de financiación y la sustitución de las importaciones y ayuda a la exportación.

José Luis Díaz Fernández, vicepresidente ejecutivo de la Empresa Nacional del Petróleo, hizo un balance de nuestra situación energética y señaló la necesidad de la energía nuclear.

Raúl Celestino, consejero delegado de Dragados, anunció que en el sector de la construcción 1977 tiene muchas posibilidades de ser, a pesetas constantes, restrictivo con respecto a 1976.

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