Es preciso reconocer a las regiones

Una cosa es que la abstención no sea un dato homogéneo e inequívoco, y otra que la diferencia de participación de unas provincias a otras, con un máximo en Avila de más del 80 % y un mínimo en Tenerife o Guipúzcoa de menos del 40 %, no sea un signo digno de la mayor atención. Diferencia stan notables muestran que el estilo unitario y centralista que un día cruzó los Pirineos y halló arraigo en la Administración del Estado, no se adapta a las necesidades de un país tan plural ni a las condiciones de una opinión pública tan diversificada. No basta con acudir a responder a tal o cual llamada acuc...

Una cosa es que la abstención no sea un dato homogéneo e inequívoco, y otra que la diferencia de participación de unas provincias a otras, con un máximo en Avila de más del 80 % y un mínimo en Tenerife o Guipúzcoa de menos del 40 %, no sea un signo digno de la mayor atención. Diferencia stan notables muestran que el estilo unitario y centralista que un día cruzó los Pirineos y halló arraigo en la Administración del Estado, no se adapta a las necesidades de un país tan plural ni a las condiciones de una opinión pública tan diversificada. No basta con acudir a responder a tal o cual llamada acuciante -días pasados acudió el Gobierno a satisfacer necesidades de las Canarias-. Es preciso reconocer institucionalmente a las regiones. ( ... ) 16 diciembre