Capitalismo e inflación
El análisis que hace don Francisco Bustelo (página 8, 16-11-76) sobre las causas de la baja de la Bolsa no contempla, a mi modo de ver, todos los aspectos del problema.Son precisamente los países que más estrictamente se han ajustado a la economía de mercado (Estados Unidos, Alemania, Suiza) los que han logrado excelentes resultados tanto en la lucha contra la inflación como en la reactivación de su economía. A sensu contrario en métodos y resultados, no faltan ejemplos (Inglaterra, Italia).
Las causas perturbadoras son múltiples: a) bajo rendimiento de un importante sector nacionalizad...
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El análisis que hace don Francisco Bustelo (página 8, 16-11-76) sobre las causas de la baja de la Bolsa no contempla, a mi modo de ver, todos los aspectos del problema.Son precisamente los países que más estrictamente se han ajustado a la economía de mercado (Estados Unidos, Alemania, Suiza) los que han logrado excelentes resultados tanto en la lucha contra la inflación como en la reactivación de su economía. A sensu contrario en métodos y resultados, no faltan ejemplos (Inglaterra, Italia).
Las causas perturbadoras son múltiples: a) bajo rendimiento de un importante sector nacionalizado, con su corolario de precios políticos, subvenciones, etc.; b) aparición de nuevos poderes con los que no contaba Montesquieu, sin existir mecanismos de equilibrio entre sí y con los tradicionales Cuarto poder: la prensa. Quinto poder: los sindicatos. Sexto poder: los grupos de presión sectoriales; c) mayor capacidad del sector secundario para generar rentas tecnológicas que benefician a sus trabajadores, a estas mejoras se quieren apuntar también los de los sectores primario y terciario; d) mayor o menor existencia del animus laborandi en el cuerpo social. Haciendo un «chequeo» de esta lista con los países arriba citados, la correlación es indudable.
Con ello no se resolverían todos los problemas, por supuesto, pero parece que es un buen principio. Y si miramos al Este y sus países socialistas de rígido capitalismo monopolista de Estado, ni han conseguido un nivel comparable de bienestar, ni han escapado a la actual crisis, ni han encontrado remedios, como no sea endeudarse con los países de Occidente en más de 40.000 millones de dólares.