Dinamarca, paralizada por una huelga de transportistas

Dentro del contexto del Mercado Común se considera generalmente a Dinamarca como un país pragmático, que resuelve sus conflictos sociales a través de una pacífica negociación del aparato sindical con los representantes de los intereses patronales.Sin embargo, la situación económica y sindical ha ido degradándose en los últimos tiempos con una subida de precios más vertiginosa que la de los salarios, lo que ha motivado una serie de huelgas en todo el país. Tanto el Ministerio de Trabajo, como el Parlamento y la coalición de partidos que sostiene al Gobierno socialdemócrata, se encuentran ahora ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Dentro del contexto del Mercado Común se considera generalmente a Dinamarca como un país pragmático, que resuelve sus conflictos sociales a través de una pacífica negociación del aparato sindical con los representantes de los intereses patronales.Sin embargo, la situación económica y sindical ha ido degradándose en los últimos tiempos con una subida de precios más vertiginosa que la de los salarios, lo que ha motivado una serie de huelgas en todo el país. Tanto el Ministerio de Trabajo, como el Parlamento y la coalición de partidos que sostiene al Gobierno socialdemócrata, se encuentran ahora en una situación complicada.

La más importante de estas huelgas es la de los transportes, que afecta sobre todo a los productos de primerísima necesidad: la leche y el petróleo. La leche porque, en número anual de litros por habitante, tiene el rango indiscutible de bebida nacional; el petróleo porque no sólo paraliza el transporte y la industria, sino también la calefacción doméstica, de la que no es fácil prescindir en estas latitudes.

El conflicto estalló el lunes y comprende a unos 1.200 chófer de camiones-tanque. Las exigencias de los huelguistas comprenden diferentes reivindicaciones. Por lo que toca al salario, los chóferes de Copenhague reclaman diez coronas más por hora, es decir algo más de cien pesetas y ayer se han iniciado contactos con el Ministerio de Trabajo sobre el asunto. Los chóferes han declarado que se reunirán para discutir las proposiciones el jueves próximo. Aparte de la leche y el Petróleo, otros productos de primera necesidad se añadirán pronto al conflicto.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En