La plantilla de Astilleros de Mallorca suspendida de empleo y sueldo

Los obreros de Astilleros de Mallorca, SA siguen sin incorporarse al trabajo, después de la decisión que fue tomada por los propios trabajadores en una reunión celebrada en la Delegación Provincial de Sindicatos. La empresa ha anunciado a éstos la suspensión de empleo y sueldo por un período de cuatro días, comunicándoles que deben incorporarse al trabajo el próximo día 2 de noviembre, y advirtiéndoles que si continúan en su actitud, la empresa se verá obligada a aplicar una nueva sanción, la máxima que permiten las leyes.

Astilleros de Mallorca también ha tomado el acuerdo de sanci...

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Los obreros de Astilleros de Mallorca, SA siguen sin incorporarse al trabajo, después de la decisión que fue tomada por los propios trabajadores en una reunión celebrada en la Delegación Provincial de Sindicatos. La empresa ha anunciado a éstos la suspensión de empleo y sueldo por un período de cuatro días, comunicándoles que deben incorporarse al trabajo el próximo día 2 de noviembre, y advirtiéndoles que si continúan en su actitud, la empresa se verá obligada a aplicar una nueva sanción, la máxima que permiten las leyes.

Astilleros de Mallorca también ha tomado el acuerdo de sancionar con la suspensión de empleo y sueldo a dieciocho obreros pertenecientes a la sección de yates pues ésta fue la que inició la huelga el pasado lunes, en señal de protesta por el despido del jefe del equipo de la misma, Rafael Pérez, y de otros catorce compañeros que figuraban en una contrata especial.

El total de los obreros que tiene en este momento la empresa Astilleros de Mallorca, SA es de unos 230, que figuran en plantilla, además de unos doscientos más que forman parte de contratas especiales y que pertenecen a empresas subsidiarias.

Por su parte, el director de Astilleros de Mallorca, SA comunica a EL PAIS que las causas reales del paro no son como ayer informaban ciertas fuentes a nuestro corresponsal- el despido de veintitrés trabajadores, sino la no aceptación por la empresa de una reivindicación de un aumento de un 35 % en los salarios, de una reducción de la jornada laboral a 40 horas y de otra serie de «condiciones impracticables, -sigue el comunicado de la empresa- antes de llegar al término, primero de diciembre próximo, del laudo dictado por la Delegación de Trabajo, el primero de junio pasado, y que ya supuso un aumento del 33 % en los salarios».

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