Un sólo herido en el encierro de ayer

Tres minutos y treinta segundos duró el encierro de ayer, que se corrió con seis toros de los herederos de Pablo Romero a los que acompañaban ocho mansos blancos y uno negro. Al final, sólo un corredor tuvo que ser asistido de heridas producidas por una de las reses que le sorprendió al volver desde las puertas del corral hasta las de entrada a la plaza.Entre los asistentes al encierro, en número inferior a los días anteriores, se comentaron continuamente los incidentes habidos el pasado lunes. Ante el temor de que ocurriera lo mismo, los pastores, en la cuesta de Santo Domingo, retiraron algú...

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Tres minutos y treinta segundos duró el encierro de ayer, que se corrió con seis toros de los herederos de Pablo Romero a los que acompañaban ocho mansos blancos y uno negro. Al final, sólo un corredor tuvo que ser asistido de heridas producidas por una de las reses que le sorprendió al volver desde las puertas del corral hasta las de entrada a la plaza.Entre los asistentes al encierro, en número inferior a los días anteriores, se comentaron continuamente los incidentes habidos el pasado lunes. Ante el temor de que ocurriera lo mismo, los pastores, en la cuesta de Santo Domingo, retiraron algún mozo que no estaba en condiciones

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