Alcaraz se reúne con su idolatrado Federer, “el Messi del tenis”
El murciano debuta en la Laver Cup, donde coincide con la leyenda que más le ha inspirado y con la que peloteó hace cuatro años, cuando todavía era un júnior
Desde que colgase hace dos años la raqueta, Roger Federer apenas se ha dejado ver por el entorno tenístico y se ha volcado preferentemente en su faceta familiar y como hombre de negocios. Sin embargo, sigue mirando de reojo su deporte y fue también hace dos años cuando mientras contemplaba la final de Wimbledon por la televisión, lo vio muy claro: lo excepcional. Se refería el legendario suizo a Alcaraz, que entonces firmó una extraordinaria remontada frente a Djokovic...
Desde que colgase hace dos años la raqueta, Roger Federer apenas se ha dejado ver por el entorno tenístico y se ha volcado preferentemente en su faceta familiar y como hombre de negocios. Sin embargo, sigue mirando de reojo su deporte y fue también hace dos años cuando mientras contemplaba la final de Wimbledon por la televisión, lo vio muy claro: lo excepcional. Se refería el legendario suizo a Alcaraz, que entonces firmó una extraordinaria remontada frente a Djokovic en la central inglesa. “Ya sabes, el quinto set y la manera en la que maneja ese tipo de situaciones Novak… Pero Carlos logró superarlo, así que me dije: ‘ok, es él, y va a estar por aquí durante mucho tiempo”.
Resulta que el mismo joven fuera de serie que le impresionó aquel día y al que todavía no ha visto jugar en directo fue siempre un ferviente admirador de su fantasía; tanto que, la primera vez que coincidieron, cuando a uno ya le fallaba la rodilla que a posteriori le retiraría y el otro ni siquiera había pisado el circuito de élite, el murciano no conseguía articular una frase seguida. 2019 la fecha, las pistas de entrenamiento de Wimbledon el escenario; 39 años de un lado y 17 del otro. Un encuentro registrado en una foto que desde entonces tiene un espacio privilegiado en la habitación que todavía ocupa Alcaraz en la vivienda familiar de Murcia, y que no se hubiera producido si no hubiera intervenido su preparador, Juan Carlos Ferrero.
“Pude calentar con él por Juanki, porque el día anterior había entrenado con Roger y le dijo que estaba con un júnior; por eso tuve la oportunidad. En ese momento yo tampoco hablaba mucho inglés, y entre los nervios, el no hablar demasiado el idioma y que estuviera ahí rodeado de gente, pues la verdad es que no me salían las palabras. Le dije: ‘hello, how are you?’. Y poco más en ese momento... Por eso, me gustaría poder pasar algo más de tiempo con él aquí, en la Laver, y poder hablar de otras cosas”, contaba estos días Alcaraz en Berlín, donde a partir de hoy participará en la cita anual —Europa contra el Resto del Mundo— que organiza el genio desde 2017.
El caso es que al día siguiente, Federer descartó ejercitarse de nuevo con el español, por el mero hecho de que le apetecía volver a pelotear con Ferrero, de 44 años. “Mi entrenador me dijo: ‘¿Quieres volver a calentar con él?’. Y yo le dije: ‘No, está bien, prefiero calentar con su técnico, que fue de mi generación’. Pero bueno, puedo pedirle perdón a Carlos esta semana…”, bromea el de Basilea, entusiasmado de poder contar ahora con el tenista por el que los aficionados y no pocos compañeros del circuito beben los vientos. Uno de ellos, Alexander Zverev, quien ayer lanzaba flores al murciano durante la presentación del torneo que tendrá lugar este fin de semana en la capital alemana.
“Para mí es un privilegio… No escuches esto, porque tienes 12 años [son 21] y no debería decirte tantas cosas agradables… [risas]”, se dirigía al de El Palmar. “Decía que es un privilegio compartir la pista con el que ya es una leyenda de nuestro deporte y que solo puede ir a más desde ahora. Tuve el privilegio de jugar el dobles un par de veces con Roger, lo cual fue muy especial, así que hacerlo ahora con Carlos también lo es. Este año ya tuvimos un par de batallas complicadas en Australia y Roland Garros, así que tenerlo ahora de mi lado es mucho mejor”, prolongaba el gigantón de Hamburgo.
El caso es que a falta del reencuentro entre Federer y Rafael Nadal, baja el de Manacor por decisión propia, el desfile de Alcaraz será el mayor aliciente de un torneo incluido en el calendario oficial, pero que en el fondo no deja de ser un mercadotécnico bolo en el que el show prevalece sobre la competición; de hecho, los participantes no ingresan punto alguno de cara al ranking, aunque sí perciben una sustanciosa cantidad económica —2,2 millones de dólares a repartir, unos 2 de euros— y la prestigiosa experiencia de haber formado parte de la fiesta organizada por el suizo; una vivencia diferente, por equipos, en la que la fortuna se dirimirá de aquí al domingo, entre cruces individuales y por parejas, con el sueco Björn Borg y el estadounidense John McEnroe como capitanes.
Hasta ahora, el combinado europeo manda, 4-2. Y pese a la falta de trasfondo histórico o tradicional alguno, ahí queda para siempre el dúo formado por Nadal y Federer en la edición de 2017, con el mallorquín festejando la victoria a lomos de su socio en Praga, y sobre todo el lacrimoso apretón de manos entre ambos en la despedida del mito, en 2022 en el O2 de Londres. Ahora, será Alcaraz el que brille por primera vez en la foto y el que pueda reunirse con el fantasista que técnicamente más le ha inspirado; trucos y más trucos nacieron de esa Wilson, y todos ellos trató de emular el chico que con 12 años y sentado en un banco situado bajo la Torre Eiffel, señalaba al suizo como su ídolo. Devoto también de la pasión de Nadal y de la maestría de Novak Djokovic, saborea estos días de disfrute en Berlín.
“Federer es el Messi del tenis, por el talento que tiene y por la facilidad para jugar”, concedía el número tres del mundo el año pasado, a su paso por el torneo de Buenos Aires. Recibe ahora él los elogios. “Lo que más me llama la atención de Carlos es su intensidad, la fuerza de sus golpes, las capacidades físicas que tiene. Por supuesto, debe tener cuidado y no puede correr a cada bola, porque no es necesario, pero es algo que aprenderá con el tiempo y la edad”, precisa el campeón de 20 grandes, quien aventura que Alcaraz conquistará tarde o temprano el Open de Australia, el único grande que le falta en el palmarés. “La pregunta es cuándo”, agrega, “porque aún tiene muchos años por delante para conseguirlo”.
Entretanto, la revista Sports Illustrated incluye el nombre de Alcaraz entre el de los 50 deportistas más influyentes de este 2024 y le describe así: “Es la combinación de dibujos animados de los Tres Grandes. Combina el talento nativo y la elegancia de Federer, la procedencia española y la persistencia de Nadal, y la ausencia de debilidades de Djokovic”. Eso sí, nada de intentar reproducir el inigualable revés a una mano del suizo: “Cuando era joven, me encantaba probar cosas nuevas y esa fue una de las que ensayé solo un día. Me encanta hacer diferentes tiros, diferentes cosas en la pista. Probablemente, ese día vi un partido de Roger Federer y traté de imitarlo…”.
FORMATO Y PROGRAMA DE LA LAVER CUP
Europa: Carlos Alcaraz, Alexander Zverev, Daniil Medvedev, Casper Ruud, Grigor Dimitrov y Stefanos Tsitsipas. Capitán: Björn Borg.
Resto del Mundo: Taylor Fritz, Frances Tiafoe, Ben Shelton, Alejandro Tabilo, Francisco Cerúndolo y Thanasi Kokkinakis. Capitán: John McEnroe.
Viernes 20: a partir de las 13:00, dos individuales. A partir de las 19.00, un individual y el dobles (con Carlos Alcaraz).
Sábado 21: a partir de las 13:00, dos individuales. A partir de las 19.00, un individual y el dobles.
Domingo 22: a partir de las 12.00, el dobles y tres individuales.
Retransmisión: Eurosport y Max.
Puntuación: los triunfos del primer día conceden 1 punto, los del segundo 2 y los del tercero 3. El equipo que llegue a 13 puntos será el ganador de la competición.