Sondeo 40dB. | ¿Qué pensamos de la selección? España celebra la multiculturalidad y adora a Lamine Yamal
Nueve de cada diez españoles, según la encuesta, verán la final de la Eurocopa este domingo ante Inglaterra después de que la Roja haya encandilado al país —a un 90% le genera sentimientos positivos— con su propuesta atractiva y valiente
La Eurocopa que ha firmado España ha sido tan, tan buena que este domingo casi nueve de cada diez españoles —el 87%— se sentarán frente al televisor para seguir la final contra Inglaterra (21.00, La1), según una encuesta del Instituto 40dB. para EL PAÍS y la Cadena SER. El partido se ha convertido en un acontecimiento histórico que ha despertado un apoyo social mayoritario entre hombres y mujeres después de que la selección sellara un camino formidable —seis victorias en seis partidos con una propuesta atractiva y valiente— hasta el choque definitivo de este domingo con el que ha vuelto a enganchar al país. Un ejemplo: el 89,9% de las personas han sentido alegría, orgullo, ilusión o euforia por la actuación de la Roja. Otro más: ocho de cada diez españoles creen que la multiculturalidad de la sociedad ha hecho mejor al equipo dirigido por Luis de la Fuente. Es elocuente que los dos jugadores favoritos de los aficionados sean Lamine Yamal y Nico Williams, los dos extremos titulares, dos jóvenes de piel oscura —uno aún es un adolescente que el sábado cumplió 17 años— cuyas familias emigraron a España en busca de un futuro mejor. Estas son las conclusiones más destacadas que arroja el sondeo, realizado el pasado jueves con 500 entrevistas online.
La multiculturalidad de la sociedad ha hecho mejor a la selección
El 80,5% de los ciudadanos está de acuerdo con que la multiculturalidad de la sociedad española ha hecho mejor al equipo dirigido por Luis de la Fuente, según la encuesta.
Dos de sus estrellas, Lamine Yamal y Nico Williams (22 años), proceden de familias que se mudaron a España para intentar salir de la pobreza. El extremo del Barça se crio en Rocafonda, un barrio obrero y humilde de Mataró (Barcelona) con una importante comunidad inmigrante. Su padre, Mounir Nasraoui, nació en Marruecos, y su madre, Sheila Ebana, es natural de Guinea Ecuatorial. Los padres de Nico, que nació en Pamplona en 2002, llegaron a la Península desde Ghana. Que en la selección haya dos jugadores titulares hijos de inmigrantes —ocurre también en otros combinados nacionales— es solo un reflejo de la sociedad española: en el país residen más de 5,5 millones de personas nacidas en el extranjero, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
El enganche que ha provocado la Roja también se observa en otros datos del sondeo. El 76,4% de los españoles dice sentirse identificado con el equipo, y el 71,3% afirma que el juego y los éxitos del mismo han contribuido a unirnos como país. Es parte del poder del fútbol, un deporte que a veces se convierte en un elemento nacional aglutinador que traspasa ideologías y clases sociales. Incluso hay un 63,1% que asegura sentirse más identificado con la selección que con su club.
Una cita para hombres y mujeres
Que el partido ante Inglaterra es un acontecimiento histórico y social transversal queda patente en los datos de la encuesta. No solo es que casi nueve de cada diez españoles (el 87%) vayan a ver la final, sino que este es un porcentaje notablemente superior a quienes consumen fútbol de manera habitual (un 67,6%).
La expectación por el choque, en el que España se puede convertir en la primera selección en conquistar cuatro Eurocopas, ha atrapado sobre todo a los hombres, pero también es elevada en las mujeres. Un 75,9% de ellos asegura que verá el encuentro, mientras que un 60,2% de ellas lo hará, una diferencia de 15,7 puntos. Sin embargo, solo un 24,8% de mujeres consume fútbol con frecuencia (56,3% de hombres). Es decir, hay un porcentaje grande de la población femenina en España que normalmente no sigue este deporte y que no se perderá la final esta noche.
Lamine, el jugador preferido de los españoles, seguido de Nico y Carvajal
Lamine Yamal, un chaval de 17 años recién cumplidos que aún usa brackets, es el jugador favorito de los españoles. Un 46% de ellos lo elige como su futbolista predilecto, muy por delante de Nico Williams (23,7%) y Dani Carvajal (14,9%).
El extremo del Barcelona, que acaba de terminar la ESO y acude a clases extraescolares de inglés, marcó en la semifinal ante Francia uno de los mejores goles de la Eurocopa: clavó a Rabiot con un cambio de dirección a unos 27 metros de la portería de Maignan, ganó el hueco suficiente y colocó el balón en la escuadra derecha francesa con un zurdazo formidable. Fue el tanto del empate —su primer gol en una Eurocopa—, con el que se convirtió en el futbolista más joven en marcar en un gran torneo de selecciones. Antes de estrenarse ante el equipo liderado por Mbappé, Lamine ya había dejado una colección de detalles técnicos fantásticos: controles fabulosos para sacudirse rivales, una facilidad asombrosa en el uno contra uno y tres asistencias de gol (ante Croacia, Georgia y Alemania).
Otro de los que sale reforzadísimo de la Eurocopa es Luis de la Fuente, el seleccionador. Un 85,6% de los españoles valora su labor al frente del equipo, y tan solo un 2,4% la califica de mala o muy mala, según la encuesta.
El técnico riojano ha sido capaz de superar las expectativas que había en torno a la Roja. Ha conseguido que un equipo que no estaba entre los tres grandes favoritos para ganar el título aterrice en la final con un pleno de victorias, pero sobre todo ha logrado que España despliegue el mejor fútbol del torneo tras unos años en los que se exageró el famoso tiqui-taca. De la Fuente, siempre con un perfil discreto y conciliador, ha mantenido esa querencia por el balón, pero ha enriquecido a la Roja con otros registros, sobre todo con la verticalidad de Nico y Lamine, dos extremos capaces de derribar cualquier defensa con su velocidad y su uno contra uno.
Es la selección favorita del 19% de la gente, pero la gran mayoría aún prefiere a la que ganó el Mundial
El fervor que han despertado la final y el juego de la Roja ha llevado a que el 19,2% de la gente elija a esta selección española como su predilecta, según la encuesta. El porcentaje de baby boomers —la generación que se creó en España a raíz de unos 650.000 nacimientos anuales entre finales de la década de los 50 y los 70— que prefiere este equipo es del 27,5%. Pero la España favorita de la gran mayoría (el 42,2%) es la que triunfó en 2010 en el Mundial de Sudáfrica. El conjunto dirigido por Luis de la Fuente, siempre según el sondeo, gusta más que el que conquistó la Eurocopa de 2008 bajo la batuta de Luis Aragonés (10,9%) y que el que elevó la de 2012 con Vicente del Bosque en el banquillo (13,5%).
La selección despierta más orgullo e ilusión entre las mujeres que entre los hombres
El planteamiento y el juego de España han encandilado tanto que casi el 90% de los españoles afirma que la selección le ha generado sentimientos positivos. A un 58,7% de la población le ha despertado alegría; a un 53,9%, orgullo; y a un 43%, ilusión. El orgullo es mayoritario entre las mujeres (59,3%) que entre los hombres (48,2%), al igual que la ilusión (45,8% frente al 40%).
Solo uno de cada diez encuestados dice que la Roja le ha aburrido (6,4%), le ha causado desdén (2,9%), frustración (1,2%) o rabia (0,8%). También hay un 13,5% que se siente indiferente y un 4,5% a los que el equipo español les genera nostalgia. Es decir, la selección provoca ahora mismo un gran consenso en la sociedad española, que en otros ámbitos, como en la política, ha sufrido una crispación elevadísima estos últimos años. Por ejemplo, el primer sondeo del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) de hábitos democráticos —publicado el pasado enero— mostraba que los ciudadanos estaban hartos de la bronca en el Congreso y reclamaban acuerdos en temas importantes (casi un 90% de la población los quería). En esa coyuntura, la Roja es un equipo que provoca una aceptación social amplísima.
Casi todos nos reuniremos para disfrutar de la final, pero lo verán solos el triple de hombres que mujeres
La forma en la que los españoles veremos este domingo la final ante Inglaterra tiene sus matices. La gran mayoría lo hará como un plan social: disfrutará del partido bien con más gente en su propia casa o en la de un conocido (63,2%), bien en un bar con amigos (13,9%). La primera idea es la que más gusta a las mujeres: el 71,3% de ellas estará con más personas en un piso para el España-Inglaterra. Sin embargo, casi uno de cada cinco hombres (el 19,1%) verá solo el encuentro (en ellas desciende al 6,5%), sin la presencia de nadie más, según la encuesta.
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