Bucks-Hawks y Thunder-Rockets jugarán las semifinales de la Copa NBA
Los de Atlanta sorprenden a los Knicks en Nueva York y los de Houston imponen su defensa sobre los Golden State Warriors
La segunda edición de la Copa NBA ya tiene semifinalistas. Los Houston Rockets ganaron en el último minuto a los Golden State Warriors (91-90), mientras que los Atlanta Hawks se impusieron con claridad a los New York Knicks (100-108) en los partidos de este miércoles. Los Rockets y los Hawks sacaron sus billetes para la final four de Las Vegas. Los de Atlanta se enfrentarán a los Milwaukee Bucks, los únicos semifinalistas del año pasado que repiten, mientras que los de Houston se medirán a los Oklahoma City Thunder. Atrás han quedado los últimos dos campeones de la NBA (los Celtics y los Nuggets), el conjunto más en forma del comienzo de temporada (los Cleveland Cavaliers) y los campeones de la primera edición (los Lakers).
Los Thunder, liderados por Shai Gilgeous-Alexander, parecen el equipo más potente de los cuatro que quedan en liza, pero a partido único, todo es posible. Los Atlanta Hawks de Trae Young han demostrado que no se amilanan ante los favoritos, los Milwaukee Bucks de Giannis Antetokounmpo y Damian Lillard quieren volver a saborear un título y los Houston Rockets vienen sacando partido a su poderío físico y su juventud desde comienzos de temporada.
Los Rockets se impusieron a los Golden State Warriors en la primera mitad del partido con un juego muy físico y una defensa muy eficaz. El equipo de Stephen Curry se quedó en menos de 20 puntos en los dos primeros cuartos, agotó dos ataques consecutivos sin llegar a tirar a canasta dentro del tiempo y los locales llegaron al descanso con ventaja de siete puntos (44-37).
Los Warriors viven un proceso de transición, lejos del nivel de su reciente etapa dorada, pero el equipo no se rindió tras quedarse atrás 40-26 a mediados del segundo cuarto. Le dio la vuelta al marcador en el tercero, en el que brillaron con luz propia el bahameño Buddy Hield, un extraordinario triplista, y el congoleño Jonathan Kuminga, número siete del draft de 2021, que ha madurado y se está ganando la titularidad esta temporada. Stephen Curry sigue dejando destellos de su increíble talento, pero a sus 36 años le cuesta echarse el equipo a sus espaldas como hacía temporadas atrás.
Se entró en el último cuarto con un 68-69 a favor de los Warriors. Los triples de los visitantes que no entraban en la primera mitad (4 de 22), empezaron a dar en el blanco en la segunda. Aunque los de San Francisco se escaparon 82-89, los Rockets volvieron a apretar los dientes en defensa. Se entró en el último minuto con una diferencia de solo tres puntos (87-90) y los Rockets siguieron anotando, mientras que los Warriors se quedaban secos.
Curry falló un triple decisivo, de los que en su mejor momento no perdonaba. El partido se decidió con una falta algo polémica a solo 3,5 segundos del final, en una lucha por el suelo por el último balón suelto en la que el árbitro podría haber pitado también un salto entre dos. “Nunca he visto algo así en la NBA”, se quejó el entrenador de los Warriors, Steve Kerr, en la rueda de prensa posterior al partido.
Por parte de los Rockets destacó el pívot turco Alperen Şengün, de 22 años, número 16 del draft de 2021, que está haciendo una gran temporada. Cerró el partido con 26 puntos y 11 rebotes. Jabari Smith, otro de los jóvenes talentos, le secundó con 15 puntos, pero el partido no lo ganaron en ataque, sino en defensa. En los últimos 3:38 minutos, los Warriors solo fueron capaces de anotar un tiro libre.
Los Knicks no dan la talla
En el otro cruce, los New York Knicks se pusieron por delante en el primer cuarto (28-22) y llegaron al descanso con ventaja (54-47) sobre los Atlanta Hawks. Sin embargo, arruinaron el partido en un tercer cuarto desastroso durante el cual llegaron a sufrir un parcial adverso de 8-27. Los Knicks aún iban por delante 66-62 antes de que Young anotara dos triples y dos tiros libres, a los que siguió un triple de Hunter. Esos 11 puntos consecutivos pusieron a Atlanta por delante por primera vez y ya no dejarían de liderar el marcador. La intensidad defensiva de los visitantes se unió a la falta de puntería de los neoyorquinos en un lado de la pista, mientras en el otro los Hawks anotaban a su antojo.
Trae Young marcó el ritmo en toda la segunda mitad y acabó el partido con 22 puntos y 11 asistencias. También estuvieron inspirados Jalen Johnson (21 puntos, 15 rebotes y 5 asistencias) y De’Andre Hunter, con 24 puntos, incluidos cuatro triples de cinco intentos. Los visitantes llegaron al comienzo del último cuarto con un 72-81 favorable. Se hicieron fuertes bajo el tablero, especialmente en el rebote ofensivo (sumaron 22 en el partido) y en una sucesión de alley-oops que los Knicks no veían cómo frenar. Los de Nueva York, además, encestaron solo 11 de sus 42 triples, para desesperación de los asistentes al abarrotado Madison Square Garden.
Young le ganó la partida a Jalen Brunson, que se quedó en 14 puntos tras una serie de solo 5 de 15 canastas en tiros de campo. Karl-Anthony Towns sumó 19 puntos y 19 rebotes, pero se cargó pronto de faltas y fue un coladero en defensa. Los Knicks, que con el fichaje de Towns aspiran a dar la batalla en la Conferencia Este, demostraron que el equipo aún no es lo suficientemente fiable.
Los Hawks, que dejaron fuera por sorpresa en la fase de grupos a los Celtics de Boston y a los Cleveland Cavaliers, se plantan en las semifinales de Las Vegas de este sábado. Se medirán a los Milwaukee Bucks de Giannis Antetokounmpo y Damian Lillard, que dieron cuenta de los Orlando Magic el martes en un partido muy reñido. Aunque los Bucks tengan más nombre, los Hawks querrán hacer honor a la condición de matagigantes que han acreditado en esta edición de la Copa NBA.