Doncic recluta a Campazzo para los Mavericks
El base argentino de 31 años, que había terminado su contrato con los Denver Nuggets, se reencuentra con el esloveno para permanecer en la NBA y no volverá al Real Madrid
Luka Doncic y Facundo Campazzo, una de las mejores parejas del baloncesto europeo en la última década, volverán a encontrarse cuatro años después para jugar juntos en los Dallas Mavericks. El base argentino de 31 años había terminado su contrato con los Denver Nuggets, el equipo al que llegó hace dos temporadas procedente del Real Madrid, y ha decidido u...
Luka Doncic y Facundo Campazzo, una de las mejores parejas del baloncesto europeo en la última década, volverán a encontrarse cuatro años después para jugar juntos en los Dallas Mavericks. El base argentino de 31 años había terminado su contrato con los Denver Nuggets, el equipo al que llegó hace dos temporadas procedente del Real Madrid, y ha decidido unirse al esloveno para alargar su aventura en la NBA. El periodista estadounidense Marc Stein avanzó el interés de la franquicia texana y las negociaciones se han traducido en un contrato de un año.
A pesar de que su experiencia en Denver no ha sido del todo satisfactoria, yendo de más a menos en estos dos años, Campazzo nunca abandonó su idea de triunfar en la NBA. En sus dos temporadas con los Nuggets, jugó 130 partidos, promediando 5,6 puntos, 3,5 asistencias, 1,9 rebotes y 1,1 robos en 20,1 minutos de media por encuentro. Lejos de sus números en el Real Madrid, donde firmó 10,2 puntos, 4,7 asistencias, 2,3 rebotes y 1,6 robos por partido. Pero el Facu nunca se ha desviado del camino. “Mi atención y mi energía están puestas en la NBA. Mi primera opción es esa”, afirmó el pasado agosto antes de embarcarse con la selección argentina en la AmeriCup. El combinado celeste salió campeón del torneo y el base fue incluido en el quinteto ideal.
Campazzo llega a Dallas consciente de que tendrá que ganarse los minutos. El argentino cuenta con la confianza del técnico, Jason Kidd, que ha sido clave insistiendo a lo largo de todo el verano en su fichaje, pero partirá en principio como el tercer base de la plantilla por detrás de Spencer Dinwiddie y el francés Frank Ntilikina. Sin embargo, juega a su favor la gran conexión que demostró en su etapa en el Real Madrid con Doncic, el alfa y la omega de los Mavericks.
Aunque estuvieron poco tiempo juntos en el Real Madrid, los dos jugadores formaron una sociedad exterior que propulsó al equipo hasta una de las mejores temporadas de su historia. En la 2017-18, el Madrid ganó el doblete ACB-Euroliga, el último título europeo del equipo blanco. “Me alegra que esté jugando bien y demostrando que merece su lugar en la NBA”, dijo Doncic la pasada temporada tras un partido entre Denver y Dallas. “Siempre es un placer verlo y jugar contra él, aunque prefiero tenerlo en mi equipo”. Deseo concedido.
El año pasado, el esloveno guio a Dallas a su primera final de conferencia desde 2011, cuando la franquicia ganó por primera y única vez el anillo de la NBA de la mano de Dirk Nowitzki. Para esta temporada, su cuarta en la NBA en la que cumplirá 25 años, Doncic se fija un doble objetivo: el anillo y el MVP. Este último propósito juega a favor de Campazzo. En el año que compartieron en el Madrid, Doncic ganó el MVP de la ACB y la Euroliga con el argentino como su mejor camarada. Además, casualidad o no, hasta 2020, el año de la llegada de Campazzo a la NBA, nunca un jugador de Denver se había llevado el premio MVP de la NBA. Desde entonces, los dos últimos galardones han sido para el pívot de los Nuggets, Nikola Jokic.
Una pensión por seguir en la NBA
La llegada de Campazzo a Dallas se produce después de que el base haya rechazado regresar al Real Madrid. El club blanco estuvo en conversaciones con el argentino desde que terminó su contrato en Denver, pero el jugador siempre se mantuvo firme en su deseo de permanecer en la NBA. “El Real Madrid es el escaparate más grande que hay en Europa y ser parte de ese club me ayudó a estar en la NBA, pero la realidad es que yo quiero enfocarme en seguir en Estados Unidos”, declaró el argentino en una entrevista en La Nación antes de partir con su selección a la AmeriCup.
El premio por resistirse a la tentación de regresar a un lugar en el que tendría un papel más importante será una pensión vitalicia. Al alcanzar su tercera temporada en la NBA, Campazzo se asegura una retribución de por vida, que irá en función de los partidos que acabe jugando en la liga americana.
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