El entrenador del Rayo femenino jaleó una violación grupal
Las jugadoras del equipo, las peñas vallecanas, el CSD y los sindicatos de futbolistas arremeten contra el técnico, que en un mensaje de audio puso como ejemplo de unión el caso de la Arandina: “Hay que coger a una y cargárnosla todos juntos”. El preparador pide perdón
―¡Qué pasa, equipo! Dos cosas: espectacular la primera parte […] y luego la otra es que este staff, Álvaro, estoy contigo en que es increíble pero nos faltan cosas, nos falta, sigo diciéndolo, hacer una pues como los de la Arandina tío, nos falta ir y que cojamos a una, pero que sea mayor de edad para no meternos en jaris, y cargárnosla ahí todos juntos. Eso es lo que une realmente a un staff y a un equipo. Mira a los del Arandina, iban directos al ascenso. Venga chavales, bue...
―¡Qué pasa, equipo! Dos cosas: espectacular la primera parte […] y luego la otra es que este staff, Álvaro, estoy contigo en que es increíble pero nos faltan cosas, nos falta, sigo diciéndolo, hacer una pues como los de la Arandina tío, nos falta ir y que cojamos a una, pero que sea mayor de edad para no meternos en jaris, y cargárnosla ahí todos juntos. Eso es lo que une realmente a un staff y a un equipo. Mira a los del Arandina, iban directos al ascenso. Venga chavales, buen domingo.
Este es el audio, al que ha tenido acceso EL PAÍS, que Carlos Santiso, actual entrenador del Rayo femenino, de 31 años, envió a un grupo de WhatsApp con su cuerpo técnico cuando era entrenador de infantiles del club. La conversación es de hace cuatro años, salió a la luz el 25 de noviembre, día contra la violencia de género (el técnico entrenaba por entonces al equipo sub-12 en la Federación madrileña de fútbol) y ha levantado una inmensa polémica después de que el conjunto madrileño, último clasificado en la primera división femenina, haya contratado de nuevo a Santiso tras una etapa anterior.
“Los del Arandina” son los tres futbolistas (Carlos Cuadrado, Lucho, de 24 años por aquel entonces; Víctor Rodríguez, Viti, de 22, y Raúl Calvo, de 19) que en noviembre de 2017 invitaron a una niña de 15 años a su casa y la agredieron sexualmente. La Fiscalía pidió de 39 a 40 años de cárcel, la Audiencia Provincial de Burgos les condenó en diciembre de 2019 a 38 por “agresión sexual” y tres meses después la Sala Civil-Penal del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León absolvió a uno de ellos y rebajó las penas a cuatro y tres años a los otros dos al considerar que el delito cometido fue de abusos.
Raúl Martín Presa, presidente del Rayo Vallecano, anunció el pasado viernes la contratación de Santiso para el equipo femenino, que marcha último con cinco puntos en 17 partidos. El sábado 29, en la ciudad deportiva, los aficionados colgaron una pancarta que intentó arrancar la mujer del técnico y que ponía: “Por respeto a la mujer, Santiso fuera de VK [Vallecas]”.
En conversaciones con la Cadena SER, Presa se defendió diciendo que ficha “a profesionales y no a personas”, que no va a “entrar en polémicas ni hacer caso a ninguna presión mediática para echar al entrenador”. Este periódico ha intentado ponerse en contacto con él sin obtener respuesta. Tampoco la consiguió de Santiso. El técnico, que estuvo en el banquillo del equipo femenino hasta el pasado mes de julio, dijo en la SER que esas palabras eran parte “de una charla informal entre amigos”.
A última hora de este martes el club publicó un comunicado en el que Santiso explica que no habló antes “por no tener la fuerza física y mental debido a la magnitud de lo sucedido”. El entrenador pide perdón y asegura arrepentirse de la “broma desafortunada, machista, imperdonable y muy de mal gusto”, afirma que no tiene ningún antecedente penal y que lleva 15 años trabajando de “manera intachable” en la formación de jóvenes futbolistas. “Esta actitud de perdón y comprensión que ha mostrado el Rayo Vallecano está impidiendo que me derrumbe y se me destruya como ser humano pese a toda la corriente mediática que está empujando en este sentido por una acción impresentable que tuve hace cuatro años”.
José Manuel Franco, presidente del Consejo Superior de Deportes, pide, en declaraciones a este periódico, que el club vallecano dé explicaciones, al tiempo que se muestra indignadísimo. “Las palabras que ha pronunciado esta persona y que hemos conocido son nauseabundas, indignas, terroríficas. El Rayo Vallecano debe explicar a su afición y a la sociedad por qué procede con una contratación que sonroja, que nadie entiende y que, desde luego, es lo último que merecen nuestras mujeres futbolistas”.
El Departamento de Integridad de la Federación Española de Fútbol ―de la que depende la Primera Iberdrola― estudió el caso el mismo sábado y lo consideró lo suficientemente grave como para trasladarlo al Comité de Ética, un organismo formado por tres abogados externos e independientes (dos de ellos del Estado) que está elaborando un informe cuyas conclusiones se esperan para los próximos días.
El sindicato FUTPRO, por su parte, anunció este martes que “está trabajando ya en medidas efectivas que impidan” que el Rayo Vallecano disponga de un entrenador con los precedentes de Carlos Santiso e instó al club a que “haga un ejercicio de responsabilidad a la hora de contratar el servicio técnico del club”. La AFE (Asociación de Futbolistas Españoles) también sacó un comunicado el pasado sábado para “reprobar” los comentarios de Santiso —”no se pueden tolerar”— y para ponerse al servicio de las futbolistas.
Hasta este martes a mediodía, la plantilla no había secundado ninguna de estas acciones ni recogido la “protección” que le había brindado la AFE. Finalmente, decidieron dejar clara su postura a través de un comunicado en la página web de la Asociación de Futbolistas. “Reprobamos y rechazamos estas declaraciones por ser contrarias a la dignidad de las mujeres y que son de una gravedad que no es aceptable en ningún caso. Como trabajadoras y profesionales del fútbol vamos a ser beligerantes contra expresiones de esta índole. Queremos dejar claro que si estas palabras hubieran correspondido a unos hechos, nosotras lo hubiéramos denunciado de forma inmediata ante la autoridad judicial”, escriben.
AFE, por su parte, ha anunciado que va a llevar, como miembro que es, el asunto a la Comisión Negociadora del Plan de Igualdad del Rayo Vallecano, para que se actúe en defensa de la dignidad de las profesionales. Según Cristina Keka Vega, delegada del fútbol femenino de AFE y exjugadora del Rayo, ya se ha mantenido una reunión al respecto. “En la siguiente, en los próximos días, denunciaremos y preguntaremos por qué el club ha hecho esta contratación, si había antecedentes”.
El motivo del silencio de la plantilla, según varias personas que conocen la situación que están viviendo desde hace meses, es que tienen miedo a otro enfrentamiento con el presidente. El enésimo después de la pelea por conseguir que se les diera de alta en la Seguridad Social, del malestar por no dejarlas aparcar dentro de la ciudad deportiva como sí puede hacer la plantilla del equipo masculino, y de otras muchas carencias. En noviembre denunciaron la precariedad del día a día —sin gimnasio en las instalaciones ni servicios médicos, por lo que en un partido contra el Athletic y tras un choque, Camila Sáez tuvo que ser atendida por los galenos del equipo rival por un golpe en la cabeza—. Un año antes denunciaron agravios hasta en las comidas. Después de un partido contra el Levante, recibieron de cena un sándwich de pavo y dos manzanas. El club dijo que era una dieta aprobada por los nutricionistas.
Así lo resume Vega, de AFE: “Llevan ya tantas historias a sus espaldas. No sé qué número de episodio es el que viven en el Rayo...”. Preguntada por si alguien de AFE ha conseguido hablar a título personal con Martín Presa sobre este asunto, contesta: “La comunicación directa con el presidente del club es imposible. Siempre hemos intentado, no solo hoy, hablar con él, por el tema de impagos, seguridad social, viajes, etc. No responde, no coge el teléfono, el Rayo Vallecano está un poco a la deriva, cada dos por tres salen empleados y eso es que algo ahí dentro no va bien”.
Ángel Barrancos, que fue presidente de los accionistas minoritarios y ahora es vocal, tilda a Martín Presa de misógino y dice que el suyo con las futbolistas es “un trato vejatorio porque sí”. La afición del equipo vallecano se movilizó desde el mismo sábado. “Somos la federación de peñas, la plataforma ADRV y los accionistas minoritarios. Dimos el primer paso, hace falta una gran presión social esta vez para que Presa recule. Mañana [este miércoles a las 17.00 contra el Valencia] tenemos un partido muy importante, que se juegue y el jueves volvemos a la carga. Mandaremos un escrito al CSD”, explica.
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