La ley de David García se impone en Granada

Osasuna se impuso de manera clara al Granada. Tres puntos que rompen su mala racha fuera de casa, donde no ganaba desde el 17 de octubre, y que le hacen distanciarse hasta 10 puntos de la zona de descenso. El Granada fue siempre superado por un rival que mereció incluso un marcador más rotundo por el aluvión de ocasiones a favor que tuvo en la segunda mitad, cuando Robert Moreno se la jugó metiendo un delantero tras otro en busca del empate. No estuvo ahí el proble...

Osasuna se impuso de manera clara al Granada. Tres puntos que rompen su mala racha fuera de casa, donde no ganaba desde el 17 de octubre, y que le hacen distanciarse hasta 10 puntos de la zona de descenso. El Granada fue siempre superado por un rival que mereció incluso un marcador más rotundo por el aluvión de ocasiones a favor que tuvo en la segunda mitad, cuando Robert Moreno se la jugó metiendo un delantero tras otro en busca del empate. No estuvo ahí el problema del equipo andaluz. Más bien en la pérdida de esa intensidad y eficacia que le habían permitido huir de los puestos bajos de la clasificación. Osasuna abrió el camino de su triunfo con un gol de cabeza de David García, quien regresaba al equipo titular navarro. El central es el defensa con más goles de la Liga (4), todos de cabeza. También es el máximo anotador de su equipo junto a Kike García, que marcó el segundo tanto de Osasuna para poner la rúbrica a su justísimo triunfo en Los Cármenes. El Granada debe recuperar de nuevo el ímpetu que le tuvo siete partidos seguidos sin perder. Le toca recomponerse y tiene un duro calendario por delante. Ante Osasuna no tuvo la más mínima opción.

“Tenemos que volver a ser nosotros”, proclamaba en la previa Robert Moreno, entrenador de un Granada que había remontado el vuelo después de un mal inicio de campeonato. Tras caer goleado en Getafe (4-2), el Granada da síntomas de confusión. Lo aprovechó muy bien Osasuna, que tampoco está para tirar cohetes después de una racha de solo un triunfo en los últimos 12 partidos. Fue mejor el conjunto navarro en un primer tiempo donde supo anular a Milla, impidiendo en todo momento la conexión del centrocampista con los dos buenos delanteros que tiene el conjunto andaluz, Jorge Molina y Luis Suárez. Al cuarto de hora se escucharon los primeros silbidos en Los Cármenes porque el Granada no respondía. Osasuna dominaba el centro del campo y casi las áreas. Tuvo, no obstante, un problema básico que empieza a agobiarle: la falta de gol. Después de seis partidos sin ver puerta lejos de Pamplona, Moncayola, con todo a favor, erró su disparo dentro del área. Fue justo un minuto después de que el colegiado anulara un gol al propio Moncayola por un fuera de juego muy justo de Budimir.

Osasuna solo se despistó en una jugada en el primer acto. Fue la única acción digna en ataque del Granada, donde Collado debutaba de titular con escaso éxito. Jorge Molina le dio un pase muy bueno a Puertas, que se encontró con que Herrera le tapó su intento de vaselina. Poco bagaje en ataque para el equipo andaluz, superado en casi todo, menos en el marcador, por Osasuna.

El conjunto navarro fue el dominador del partido en la segunda mitad. Moreno intentó dotar de más fuerza a su centro del campo con la entrada de Gonalons. La medida resultó infructuosa porque Osasuna creció a medida que pasaban los minutos. En un saque de esquina muy bien sacado por Rubén, David García remató de forma inapelable con la cabeza para hacer el 0-1. El Granada se descompuso y la apuesta atacante de su entrenador acabó por abrirle los caminos de la portería de Maximiano a los navarros. El meta portugués realizó dos grandes paradas ante Ávila y Kike García, pero no pudo hacer nada en el último minuto, cuando el propio Kike García remató en el área pequeña después de una gran jugada de Osasuna. Seis partidos después, tras cuatro derrotas y dos empates, los de Arrasate ganaron fuera de casa para respirar, y mucho, en la zona media de la clasificación.

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