Marcos Alonso: “En España me conocen menos que en Italia o Inglaterra”
El lateral del Chelsea ha regresado a la selección tras tres años de ausencia y relata los entresijos de una carrera forjada desde los 19 años fuera del fútbol español
Cuando Luis Enrique se hizo cargo de la selección tras el Mundial de 2018, Marcos Alonso (Madrid, 30 años) entró en las dos primeras convocatorias de septiembre y octubre. Julen Lopetegui le había hecho debutar seis meses antes en un amistoso contra Argentina (6-1) y en el estreno del preparador asturiano fue titular en la primera de edición de la Liga de las Naciones, ante Inglaterra en Wembley (1-2). Un mes después, los ingleses, liderados p...
Cuando Luis Enrique se hizo cargo de la selección tras el Mundial de 2018, Marcos Alonso (Madrid, 30 años) entró en las dos primeras convocatorias de septiembre y octubre. Julen Lopetegui le había hecho debutar seis meses antes en un amistoso contra Argentina (6-1) y en el estreno del preparador asturiano fue titular en la primera de edición de la Liga de las Naciones, ante Inglaterra en Wembley (1-2). Un mes después, los ingleses, liderados por Harry Kane, se impusieron en Sevilla (2-3) y Alonso desapareció de la selección. Nieto e hijo de futbolistas notables (Marquitos y Marcos) para formar una saga histórica, por ser los tres internacionales, y campeón de la última Champions con el Chelsea, donde se ha ganado la confianza de Thomas Tuchel, el miércoles, en San Siro, reapareció como internacional con una actuación sobresaliente.
Pregunta. Después de tres años, usted mismo había confesado que tenía pocas esperanzas de volver. ¿Siente que ante Italia se graduó en la selección?
Respuesta. No sé, más que nada, poco a poco me va conociendo la gente en España. He hecho carrera fuera, la gente ve más la Liga que la Premier y puede que haya sorprendido, pero yo sé de lo que soy capaz y lo que llevo haciendo hace años.
P. ¿Se cree poco reconocido?
R. No, en todos los equipos me he sentido reconocido y querido. En España es donde menos me conocen, menos que en Italia o en Inglaterra.
P. ¿Perciben esa falta de desconocimiento los internacionales que están fuera a pesar de jugar en grandes clubes?
R. Sí, pero es lo normal, al final la gente está más cerca de lo que ve más.
P. ¿Ha sido poco exigente consigo mismo?
R. Al revés, he tenido momentos complicados en los que no ha sido fácil dar todo e incluso más. Por eso, antes o después he acabado demostrando lo que soy. El Bolton, al que llegué lesionado y con 19 años, era un equipo que no practicaba el juego de ataque al que yo estaba acostumbrado en el Real Madrid y acabé haciéndolo bien y saliendo a la Fiorentina. Allí tenía delante al capitán del equipo y lateral de la selección italiana [Pasqual] y al de la selección peruana [Vargas] y terminé jugando. En el Chelsea tuve a Ivanovic y esta ya es mi sexta temporada. Falta de exigencia mía, no.
P. ¿Será entonces que hace poco ruido?
R. Donde yo puedo hacer ruido es en el campo y eso siempre lo he intentado al máximo. Al final es la opinión de cada entrenador poner al que quiera y, en el caso del seleccionador escoger, y hay que respetarlos.
P. Usted estuvo en las dos primeras listas de Luis Enrique y dejó de ser convocado. ¿Se preguntó por qué?
R. No, la verdad es que desde hace tiempo me tomo la selección como una recompensa, al final juego para mi club e intento hacerlo lo mejor posible. Si luego tengo la suerte de venir a la selección, me lo tomo como un premio al trabajo.
P. Los análisis que ha hecho la prensa en general sobre su ausencia de tres años se centran en el partido de Sevilla en el que Inglaterra gana (2-3). Usted y Nacho desaparecieron de la selección desde aquella derrota. ¿Defensivamente no convenció al seleccionador?<
R. No sé qué decir, eso lo sabrá el míster. En la selección hay grandes jugadores y la competencia es máxima.
P. ¿Contra Italia fue el partido en el que más a gusto se ha sentido en la selección?
R. Sí, ha sido el mejor partido, contra Italia, en San Siro, después de 37 encuentros sin perder que llevaban y siendo campeones de la Eurocopa. Era una oportunidad grande para demostrar que somos un gran equipo. Me quedé con las ganas de poner la puntilla al partido con la ocasión que tuve.
P. Se le vio muy suelto desde el principio...
R. Con estos jugadores se hace todo un poco más fácil.
P. ¿Se acabó la tesis de que usted no puede jugar en una línea de cuatro defensas?
R. Bueno, eso… esta semana soy el mejor en la línea de cuatro y ya veremos la que viene, esto es así. Depende todo del último partido.
P. Pero usted había jugado ya mucho en línea de cuatro.
R. Sobre todo en el Madrid, no jugué en línea de cinco hasta que fui a Italia. Para mí lo distinto en aquella época era jugar en defensa de cinco. Al final te acostumbras, es verdad que cambiar de un día para otro no es tan fácil porque estás acostumbrado a otras cosas después de tanto tiempo jugando de una manera.
P. ¿Ha mejorado defensivamente con los años?
R. Sin duda, aunque no voy a decir que he aprendido a defender en estos tres años que llevo sin venir a la selección. Cuando salí del Madrid estábamos acostumbrados a defender lo justo, pero desde mi época en el Bolton y en Italia, que se entrena mucho la táctica, y en el Chelsea, con un entrenador italiano como Conte, he ido mejorando en todas las facetas. He trabajado mucho y también con la ayuda de entrenadores y compañeros. Jugando, aprendes.
P. ¿Tuchel le exige más en defensa o en ataque?
R. Si comparamos con Conte, que también jugaba con el sistema de cinco, incluso tenemos más libertad para llegar y un poco menos de responsabilidad defensiva, pero depende del rival y del partido.
P. ¿Para usted ha sido una bendición la llegada de Tuchel?
R. La verdad es que sí, el tiempo de atrás ha sido complicado. Es algo que les pasa a todos los futbolistas en un momento de su carrera, que tienes un entrenador que no cuenta contigo o no eres de su agrado. Pero siempre he intentado dar lo mejor de mí, he demostrado incluso cuando jugaba con Lampard en ese tiempo que estaba listo para ayudar al equipo.
P. ¿Lo de tirar las faltas cómo surgió?
R. Siempre me gustó quedarme después de entrenar y cuando era pequeño íbamos a tirar faltas, me gusta.
P. ¿De su padre cogió algo?
R. Yo creo que todo, si tengo que decir un referente es él tanto dentro como fuera del campo. Él y mi familia hemos tomado las decisiones juntos, he tenido la suerte de tener esa experiencia en casa.
P. Esa experiencia viene de una saga bien larga...
R. Sí, mi padre también tuvo esa suerte con mi abuelo.
P. Su padre, que era extremo, tenía mucho temperamento con los defensas. ¿Usted es más tranquilo?
R. Eran otros tiempos, no había VAR y daban de verdad, tendría sus razones. En los vídeos se ve que pegaban. Hoy no se puede pegar como en aquella época. Él tenía mucho carácter, yo un poco menos, pero también depende del momento.
P. Estuvo en el inicio de la primera etapa de Luis Enrique y ahora. ¿Ha cambiado algo la idea de juego?
R. No, el partido con Italia es el ejemplo de a lo que ha jugado siempre esta selección. Es un estilo muy conveniente para el tipo de jugadores que tenemos.
Puedes seguir a EL PAÍS DEPORTES en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.