El otro partido, de Fidel Castro a Lula

El astro del fútbol dio a sus opiniones políticas tanta dimensión como a las deportivas

El futbolista Diego Armando Maradona, en el programa de la televisión cubano 'La hora 10' con el entonces presidente Fidel Castro, en 2006.
Buenos Aires -

En su inmortal pierna izquierda, Diego Armando Maradona se tatuó el rostro de Fidel Castro, con quien mantenía una estrecha relación personal. La leyenda del fútbol argentino murió el mismo día que el líder cubano al que muchas veces visitó en la isla y cuyas políticas siempre defendió. La de Fidel fue una de las más conocidas amistades políticas de Maradona, pero no la única, como muestra la gran catarata de reacciones de líderes latinoamericano...

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En su inmortal pierna izquierda, Diego Armando Maradona se tatuó el rostro de Fidel Castro, con quien mantenía una estrecha relación personal. La leyenda del fútbol argentino murió el mismo día que el líder cubano al que muchas veces visitó en la isla y cuyas políticas siempre defendió. La de Fidel fue una de las más conocidas amistades políticas de Maradona, pero no la única, como muestra la gran catarata de reacciones de líderes latinoamericanos con los que alguna vez se reunió. Decenas de referentes políticos y sociales han enviado sus condolencias a la familia.

“Nos llevaste a lo más alto del mundo. Nos hiciste inmensamente felices. Fuiste el más grande de todos. Gracias por haber existido, Diego. Te vamos a extrañar toda la vida”, lo despidió el presidente de Argentina, Alberto Fernández, en las redes. El mandatario decretó tres días de duelo nacional por la muerte del Pelusa.

Hacía solo dos semanas que había asumido, cuando Fernández convocó a Maradona a la sede del Gobierno argentino. “Para Alberto, con mi corazón de pueblo”, le dedicó la leyenda del fútbol al presidente en una camiseta de la selección. Antes de irse, el Pelusa salió al balcón de la Casa Rosada y festejó el regreso del peronismo al poder junto a quienes le aclamaban desde la Plaza de Mayo: “Volvimos. [Mauricio] Macri nunca más”.

La pelea de Maradona con Macri se remonta a 1995, cuando Macri fue elegido presidente de Boca. “Tuve que hacer algo durísimo, porque también era mi ídolo, y de todos los argentinos, que fue sacar a Diego Maradona de Boca. Y ahí se construyó”, dijo Macri en una entrevista reciente en la que comparó al ídolo futbolístico con el peronismo. “A vos Mauricio, te digo que a mí no me echaste de ningún lado. Fui yo el que dejó el fútbol, para proteger la salud de mis viejos”, le respondió. Pese a los numerosos encontronazos que mantuvieron, el exmandatario se sumó a los saludos: “Serán imborrables las enormes alegrías que Diego nos dio”.

Cristina Fernández de Kirchner fue una de las primeras en lamentar su fallecimiento. “Mucha tristeza... Mucha. Se fue un grande. Hasta siempre Diego, te queremos mucho. Enorme abrazo a sus familiares y seres queridos”, publicó la expresidenta y actual vicepresidenta en sus redes sociales, un mensaje que compartió el exmandatario ecuatoriano Rafael Correa. Los lazos con el matrimonio Kirchner fueron muy fuertes. Néstor Kirchner pidió que lo mantuvieran al frente de la selección argentina tras la humillante derrota contra Alemania en los cuartos de final del Mundial de Sudáfrica (4-0). Cuando Kirchner murió, meses después, Maradona acompañó a Cristina Fernández en los funerales.

Los mandatarios de la izquierda latinoamericana encontraron siempre en Maradona un aliado, como reflejan en sus mensajes de condolencia. “Fue un grande en el fútbol de Argentina y de todo el mundo. Un talento y una personalidad única. Su genialidad y pasión en el campo, su intensidad en la vida y su compromiso con la soberanía latinoamericana marcan nuestra época”, adhirió el expresidente brasileño Lula da Silva.

Su fidelidad alcanzó a líderes regionales muy cuestionados, como el venezolano Nicolás Maduro. En su primera victoria en el banquillo como entrenador de Gimnasia y Esgrima de La Plata, el Diez usó una gorra con la bandera de Venezuela y la leyenda “Chávez somos todos” que le había regalado Maduro. “Nunca te rendiste. Siempre luchaste hasta el último suspiro. A siete años de tu partida estás más presente que nunca. Hasta cada momento, comandante Hugo Chávez”, posteó Maradona en Instagram, junto a una fotografía en la que se los ve juntos, el pasado 5 marzo, en el séptimo aniversario de la muerte del expresidente venezolano.

El expresidente de Bolivia Evo Morales se despidió de su “hermano del alma” también en un tuit. “Una persona que sentía y luchaba por los humildes, el mejor jugador de fútbol del mundo”, publicó. “Diego fue un gran defensor del fútbol en la altura y quería mucho a Bolivia. Gran amigo de las causas justas. No solo el fútbol mundial le llora, también los pueblos del mundo”, escribió Morales en un segundo mensaje. Ambos se reunieron en varias ocasiones y siempre mostraron admiración mutua.

El presidente de Gobierno español, Pedro Sánchez, también ha enviado sus cariños al mundo del fútbol “que hoy pierde a una de sus leyendas”, “Con tu zurda dibujaste los sueños de varias generaciones. Eterno, pibe”.



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