La cantera alivia la pandemia en el Madrid
El club blanco, por primera vez sin fichar desde 1980, ingresa solo en operaciones con sus futbolistas más jóvenes
El boquete económico causado por la pandemia el Real Madrid lo alivió en este mercado cumpliendo su promesa de no fichar, algo inédito en los últimos 40 años, y haciendo caja con sus futbolistas más jóvenes. La inmensa mayoría del dinero recaudado, alrededor de 100 millones, procedió de operaciones con jugadores criados en Valdebebas. Ante esta crisis insospechada, en el Bernabéu no ingresaron desprendiéndose de nombres de cartel, sino de noveles. De entre los integrantes del vestuario con más estatus, solo el ahorro de los s...
El boquete económico causado por la pandemia el Real Madrid lo alivió en este mercado cumpliendo su promesa de no fichar, algo inédito en los últimos 40 años, y haciendo caja con sus futbolistas más jóvenes. La inmensa mayoría del dinero recaudado, alrededor de 100 millones, procedió de operaciones con jugadores criados en Valdebebas. Ante esta crisis insospechada, en el Bernabéu no ingresaron desprendiéndose de nombres de cartel, sino de noveles. De entre los integrantes del vestuario con más estatus, solo el ahorro de los sueldos de James y Bale ayudó a suavizar los efectos de la Covid-19 este verano. Los blancos no percibieron nada por ninguno de los dos esta ventana.
En global, la entidad cumplió la mayoría de sus objetivos: vender al mejor precio posible, no comprar sino reforzarse con cedidos (Odegaard, Lunin y Odriozola), y sacar del grupo a los jugadores que no quería Zidane. Sobre todo, el colombiano y el galés. Solo se le quedó en el tintero la marcha de Mariano, que como el año pasado tampoco se fue pese a no entrar en la pizarra del entrenador. Este era el plan diseñado en las oficinas tras haber acordado en abril con las plantillas de fútbol y baloncesto, y los principales directivos una rebaja de los emolumentos del 10% para evitar un ERTE al resto de los empleados.
En casi todos los traspasos, además, el Madrid se guardó algún tipo de derecho, opción de tanteo o recompra con el objetivo, en un futuro, de ingresar más por ellos en posibles operaciones cuando el mercado gane algo de músculo financiero, o de recuperar a alguno que ahora no tiene hueco en la libreta del técnico. En este segundo caso entraría el ejemplo de Reguilón, que el club lo puede hacer suyo de nuevo por 10 millones más de lo que lo vendido al Tottenham (30). Idéntico planteamiento deportivo para alguna cesión, como la de Ceballos al Arsenal, que tampoco cuenta de momento para Zizou.
Achraf y Reguilón
La gran venta fue la de Achraf al Inter por 40 millones más cinco en variables. Tras dos campañas a préstamo en el Dortmund, el lateral derecho de 21 años prefirió tener más minutos en el equipo de Conte que luchar por la titularidad en Valdebebas con Carvajal, un fijo de ZZ. El Madrid aprovechó la coyuntura para aliviar su tesorería. Solo entre él y Reguilón dejaron 70 millones. Y a mucha distancia, en el tercer escalón, aparece Óscar Rodríguez, fichado por el Sevilla por 13,5 por el 75% de sus derechos. El resto consistió en un amplio picoteo, incluso, con futbolistas que ya dejaron el club, como Diego Llorente. Su paso de la Real al Leeds aportó a la caja casi cuatro millones porque, cuando se marchó a San Sebastián en 2017, los blancos se guardaron una opción del 30% de la plusvalía de una futura operación.
Los jóvenes aportaron el dinero fresco mientras por los dos nombres más ilustres de la macroperación salida, James y Bale, la única fórmula encontrada fue ahorrarse sus abultadas fichas. No hubo ningún ingreso por ellos, al menos inmediato. Su partida era prioritaria para satisfacer las demandas de Zidane, que hace tiempo los relegó al trastero del vestuario. El pasado verano, en la otra vida, ignorante el mundo de lo que estaba en camino, ambos pudieron irse; el colombiano por entre 40 y 50 millones. Sin embargo, se quedaron y en este mercado se buscó una salida imperiosa.
El club incluye cláusulas en las ventas para recaudar más en el futuro o recomprar
En el caso de James, al principio se informó, nunca de forma oficial, de una venta por unos 25 millones, aunque luego se supo que se había ido gratis. Lo desveló Banfield, el club argentino donde estuvo entre 2008 y 2010. “Llamamos al Madrid porque por ese dinero nos correspondían 309.000 euros. Eso es una fortuna de plata para nosotros”, afirma Nacho Uzquiza, tesorero de la entidad. “Pero nos respondieron que el traspaso había sido por cero euros. Luego el Everton nos contestó lo mismo. No sé si acordaron algún pago por variables, pero de eso ya no nos tocaría nada”, añade.
El Madrid es el único de los grandes de Europa y uno de los cinco clubes de España, junto a Betis, Valencia, Real y Alavés, que no gastaron nada en este mercado. La última vez que esto ocurrió en el Bernabéu fue en 1980. Entonces, el primer equipo tiró de un pujante Castilla, histórico finalista de Copa, y ascendió a Agustín, Ricardo Gallego y Paco Pineda. Esta vez, el papel de la cantera fue otro.