Los equipos del Tour respiran: un segundo PCR positivo no supondrá exclusión

“Después de cada batería de PCR en colectivos determinados y controlados [las burbujas, que funcionan en el Tour y en muchos otros ámbitos, como las escuelas o las empresas], los marcadores vuelven a cero. Los resultados de una segunda batería de pruebas no tendrán en cuenta la primera a la hora de determinar si hay un brote y la burbuja debe permanecer en cuarentena”, declaró a France Presse una fuente ministerial francesa, e inmediatamente suspiraron de alivio los miembros de cuatro equipos del Tour (el Ineos, el Cofidis, el Mitchelton y el Ag2r) ...

“Después de cada batería de PCR en colectivos determinados y controlados [las burbujas, que funcionan en el Tour y en muchos otros ámbitos, como las escuelas o las empresas], los marcadores vuelven a cero. Los resultados de una segunda batería de pruebas no tendrán en cuenta la primera a la hora de determinar si hay un brote y la burbuja debe permanecer en cuarentena”, declaró a France Presse una fuente ministerial francesa, e inmediatamente suspiraron de alivio los miembros de cuatro equipos del Tour (el Ineos, el Cofidis, el Mitchelton y el Ag2r) que tenían un positivo por covid-19 en las pruebas del pasado lunes. Según las previsiones sanitarias anteriores, un segundo positivo en siete días en un grupo cerrado supondría su inmediato aislamiento, que en Francia es de una semana, lo que en el Tour significa exclusión y adiós.

Ello no obsta, sin embargo, para que se mantenga que dos positivos en cualquiera de los miembros de una de las 22 burbujas de competición de 300 personas (los equipos completos, corredores y demás personal) en las nuevas pruebas PCR que el laboratorio móvil del Tour efectuará sábado, domingo y lunes, día de descanso en Grenoble, próximos, siguen suponiendo la exclusión directa.

Tanto la organización del Tour, que sufrió la baja de su director, Christian Prudhomme, positivo el lunes pasado, como los equipos se felicitan de la escasa incidencia de la pandemia en la carrera, que achacan al extremo y escrupuloso cuidado con el que todos los participantes siguen todas las normas de mascarilla, distanciamiento y limpieza de manos.

El Tour, además, sacó más pecho anunciando que las audiencias televisivas de la carrera en los 13 países europeos más importantes, incluido España, habían crecido pese a que la pandemia obligó a retrasar dos meses la carrera.