“¡Es asqueroso, los africanos no somos cobayas!”
Drogba y Eto’o, iconos deportivos en África, denuncian a dos médicos franceses que proponen en la televisión ensayos contra el coronavirus en su continente, el menos afectado por la pandemia
Prende la mecha cuando, en el marco de un programa emitido en el canal LCI de la televisión francesa, el médico Jean Paul Mira, jefe del servicio de reanimación del Hospital Cochin de París, desliza lo siguiente a su colega Camille Locht, director de investigación en el Inserm, el Instituto Nacional de la Salud y la Investigación Médica:
– Esto puede ser polémico pero, ¿no deberíamos hacer un estudio en África, donde no tienen mascarillas, ni tratamientos ni reanimación? Se hace en estudios sobre el sida, en los que usan prostitutas para probar ciertas cosas porque saben que están muy e...
Prende la mecha cuando, en el marco de un programa emitido en el canal LCI de la televisión francesa, el médico Jean Paul Mira, jefe del servicio de reanimación del Hospital Cochin de París, desliza lo siguiente a su colega Camille Locht, director de investigación en el Inserm, el Instituto Nacional de la Salud y la Investigación Médica:
– Esto puede ser polémico pero, ¿no deberíamos hacer un estudio en África, donde no tienen mascarillas, ni tratamientos ni reanimación? Se hace en estudios sobre el sida, en los que usan prostitutas para probar ciertas cosas porque saben que están muy expuestas y no tienen protección. ¿Qué piensa usted?
– Tiene razón. Estamos pensando en un estudio paralelo en África, de una manera similar. Creo que ya hay una petición que, si no se ha hecho ya, llegará, y pensamos seriamente en ello. Tampoco rechazamos un estudio en Europa o Australia…
Y, a continuación, llegan las denuncias. Primero, la del futbolista Demba Ba, que actualmente juega en el Basaksehir de Turquía. “Bienvenidos a Occidente, donde los blancos se creen tan superiores que el racismo y la debilidad se vuelven comunes. Tiempo para levantarse”, tuiteó junto a un emoticono de puño alzado el jugador, nacido en Francia (Sèvres) pero de origen senegalés, y que decidió jugar por la selección africana en lugar de por los bleus.
Después interviene Didier Drogba, uno de los futbolistas africanos con mayor cartel en la historia y estrechamente comprometido con su continente. El que fuera un demoledor ariete del Olympique de Marsella y el Chelsea, de 42 años y natural de Abiyán, Costa de Marfil, inserta el fragmento de la conversación entre los médicos en Twitter y la acompaña de una contundente reprobación.
Primero, en francés: “Es inconcebible que sigamos aceptando esto. África no es un laboratorio. ¡Denuncio enérgicamente estos comentarios serios, racistas y despectivos!”. “Ayúdennos a salvar vidas en África y detener la propagación de este virus que está desestabilizando al mundo entero, en lugar de considerarnos cobayas. ¡Es absurdo! Los líderes africanos tienen la responsabilidad de proteger a las personas de estas conspiraciones atroces”.
Posteriormente, Drogba denuncia con el mismo discurso en inglés, introduciendo una última observación. “Es absolutamente asqueroso…”, escribe el exdelantero, que se retiró hace un par de años, después de 20 como profesional y tras firmar 164 goles con el Chelsea y 65 con su selección, además de conquistar la Premier League y la Champions, entre otros títulos. Desde entonces, el marfileño ha ido compaginando labores como comentarista en la BBC, conductor de actos como la última gala del Balón de Oro y el trabajo con su fundación (The Didier Drogba Foundation), mediante la que proporciona ayudas económicas y materiales a África, el continente que actualmente registra menos contagios por coronavirus.
A los tuits de Drogba les sucede la voz del camerunés Samuel Eto’o, exjugador del Barcelona (130 tantos en 199 encuentros) y otro de los futbolistas históricos en África, ya retirado también. Y sin pelos en la lengua, siempre: “Hijos de p... Sois solo mier... África no es vuestro patio de recreo”, agrega a través de Instagram, en referencia a los doctores Mira y Locht, que departen sobre la posibilidad de aplicar tratamientos en los territorios africanos –práctica habitual por parte de Francia– y la pista de la vacuna contra la tuberculosis (BCG).
Mientras tanto, el episodio ha generado una polvareda que tratan de rebajar el Inserm y Locht. “El vídeo está sujeto a malas interpretaciones”, sostiene el organismo. “Me pareció interesante que, además de Francia y Australia, un país africano pudiera participar en un estudio [el de la vacuna de la BCG contra la Covid-19] del que nunca se había oído hablar antes de la transmisión. Di el ejemplo de las prostitutas porque muchos clientes están contagiados por el VIH… Los ensayos clínicos se realizan en todas partes, menos en África”, se defiende el médico, consultado por el HuffPost francés.