La policía portuguesa registra el domicilio de Iker Casillas

Una operación contra el supuesto blanqueo de dinero con los traspasos deriva en 76 inspecciones, incluida la de la empresa de Jorge Mendes

Iker Casillas, candidato a la presidencia de la RFEF.David Ramos - FIFA

Las sedes del Benfica, Oporto y Sporting de Lisboa, entre otros clubes de fútbol portugueses fueron ocupadas en la mañana del miércoles por inspectores de Hacienda y de la Guardia Nacional Republicana en busca de documentación sobre traspasos de jugadores. Los registros llegaron al despacho del mayor agente de futbolistas, Jorge Mendes, y al domicilio de Iker Casillas, uno de los traspasos investigados. Hay 24 sociedades y 23 personas físicas imputadas.

La operación fue dirigida por el superjuez Carlos ...

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Las sedes del Benfica, Oporto y Sporting de Lisboa, entre otros clubes de fútbol portugueses fueron ocupadas en la mañana del miércoles por inspectores de Hacienda y de la Guardia Nacional Republicana en busca de documentación sobre traspasos de jugadores. Los registros llegaron al despacho del mayor agente de futbolistas, Jorge Mendes, y al domicilio de Iker Casillas, uno de los traspasos investigados. Hay 24 sociedades y 23 personas físicas imputadas.

La operación fue dirigida por el superjuez Carlos Aleixandre -casos Sócrates y Espírito Santo- e incluyó el registro de los domicilios del presidente del Oporto, Pinto da Costa, del Benfica, Luis Felipe Vieira, del Sporting de Lisboa, Frederico Varandas y el del presidente del Sporting de Braga, António Salvador. En total, 76 órdenes de registro, 40 de ellas domiciliarias y cinco de despachos de abogados, según informó la Agencia Tributaria.

Tras finalizar los registros domiciliarios, realizados al mismo tiempo en todo el país, los inspectores judiciales —cerca de 300— se dirigieron a las sedes de los clubes; además de los citados, a las del Sporting de Braga, Estoril, Vitória de Guimaraes, Marítimo y Portimonense, todos de la primera división del fútbol luso.

La investigación se extiende a la sede de Gestifute, propiedad de Jorge Mendes, unos de los mayores representantes de futbolistas, entre ellos Cristiano Ronaldo y João Félix, y al despacho del abogado de CR7, Carlos Osório de Castro, así como a los prestigiosos bufetes de Leitão, Teles y Soares da Silva. La Operación Fuera de Juego investiga el blanqueo de dinero y la evasión fiscal con el traspaso de jugadores en los últimos cinco años. Entre esos fichajes estaría el traspaso de Iker Casillas del Real Madrid al Oporto (se hizo cargo de su contrato en vigor con el club español); el de Jackson Martínez del Oporto al Atlético (35 millones de euros); el de Nelson Semedo del Benfica al Barcelona (30 millones); el de Guedes del Benfica al PSG y Valencia (37 millones) o el de Renato Sanches, mejor jugador europeo júnior, del Benfica al Bayern por 35 millones, entre otros muchos. Todos ellos fueron realizados en las últimas cinco temporadas. En total hay en investigación 72 contratos de jugadores que envuelven a 49 futbolistas, 14 agentes y 9 sociedades anónimas.

“Esta mañana la Fiscalía ha venido a mi domicilio como ha ido a otros 76 domicilios de sociedades deportivas, jugadores y clubes para pedirme documentación. Me he puesto a su entera disposición. La transparencia es uno de mis principios”, escribió Casillas en su cuenta de Twitter. El exportero del Real Madrid es candidato a la presidencia de la Federación Española de Fútbol.

A última hora de la tarde, el ministerio público difundió una nota en la que informaba que los imputados en la Operación Fuera de Juego son 24 sociedades y 23 personas físicas, “entre ellos jugadores de fútbol, agentes o intermediarios, abogados y dirigentes deportivos”. Según la Fiscalía, los imputados trataban de evitar pagar impuestos “con la ocultación o alteración de valores”. Según la Agencia Tributaria, los implicados utilizaban “sistemas para dificultar y ocultar la verdadera identidad de los beneficiarios de rendimientos, evitando así el pago de impuestos”.

Los inspectores de Hacienda y de la Fiscalía se llevaron documentación sobre contratos de derechos de los futbolistas, derechos de imagen y comisiones de traspasos con el fin de comprobar las sospechas de recursos contables ficticios para engordar los costes de las operaciones. La Fiscalía portuguesa cuenta con la colaboración de las autoridades de Francia, España e Inglaterra.

Mucha de la documentación aportada procede del hacker informático portugués Rui Pinto, el mismo que proporcionó la información sobre la millonaria angoleña Isabel Dos Santos, los papeles de Angola Leaks, y del fútbol europeo, Football Leaks. Pinto fue extraditado de Hungría hace más de un año y desde entonces permanece en prisión preventiva en Lisboa a la espera de juicio. “Más vale tarde que nunca, gracias Rui Pinto”, escribió la exeurodiputada socialista portuguesa Ana Gomes en su cuenta de Twitter. Gomes se ha pasado años denunciando los traspasos de futbolistas como una vía para el blanqueamiento internacional de capitales.


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